CAMBIO CLIMÁTICO: Ciencia y tecnología en el agro como estrategia
Por Eduardo Fuentes Navarro
El calentamiento global causado por el cambio climático es cada vez más evidente. Entre sus consecuencias advertimos la desertificación, la degradación de la tierra, la falta de seguridad alimentaria, los flujos de gases de efecto invernadero en los ecosistemas terrestres y otras.
Se prevé que en la costa de nuestro país aumentará la salinidad del suelo y habrá mayor frecuencia de eventos climáticos extremos. En la sierra disminuirán las reservas de agua debido al retroceso de los glaciares, lo cual impactará en la agricultura de subsistencia; en tanto que en la selva se presentarán cambios en la biodiversidad y mayor riesgo de inundaciones, lo cual afectará la producción de los cultivos locales.
En este contexto, la innovación y el emprendimiento son estrategias clave para la mitigación y adaptación de los productores frente al cambio climático, ya que, además de reducir la vulnerabilidad de las familias rurales, pueden generar una economía basada en el conocimiento científico, donde se ofrezcan bienes y servicios para fortalecer las cadenas de valor de los diferentes productos agrarios. No obstante, para ello se requiere primero que en el país se hagan investigaciones de impacto.
En los últimos años, la Universidad Nacional Agraria La Molina (UNALM) ha efectuado estudios que permiten el entendimiento de técnicas agrícolas más sostenibles, como la agricultura de conservación, agroforestería y manejo integrado de plagas; además del desarrollo de variedades de cultivos que pueden adaptarse a condiciones climáticas cambiantes.
Otras investigaciones han servido para determinar la capacidad de los suelos y la vegetación con el propósito de capturar y almacenar carbono; también se han desarrollado tecnologías para mejorar la eficiencia en el uso del agua en la agricultura. De igual manera, se ha estudiado la viabilidad y eficacia de la implementación de energías renovables, como la solar o eólica, destinadas a mitigar emisiones de carbono. Los grupos de investigación, además, han diseñado estrategias y medidas para mejorar la resiliencia de las comunidades agrarias ante desastres climáticos, como inundaciones, sequías y tormentas.
Por último, la UNALM, mediante su Dirección de Innovación y Transferencia Tecnológica, promueve la vinculación con el sector empresarial para el planteamiento de soluciones climáticamente inteligentes. Asimismo, mediante su incubadora de empresas Incubagraria, impulsa emprendimientos o startups de tipo climatech, agrotech y foodtech.
Toda esta gama de aportes será presentada del 23 al 27 de octubre en la Semana de la Investigación 2023 que organiza el Vicerrectorado de Investigación, teniendo como punto central la presentación de iniciativas innovadoras para hacer frente al cambio climático.