La Contraloría General de la República se encuentra nuevamente bajo los reflectores, luego de que un memorando enviado por el Órgano de Auditoría Interna de la institución alertara sobre la posibilidad de que se incurra en un conflicto de intereses durante el proceso de Concurso Público de Méritos que se llevó a cabo este año en el proceso de número 02-2023-CG.

Según la denuncia recogida difundida el último 20 de octubre, el contralor Nelson Shack recibió el 17 de octubre el memorando N° 000748-2023-CG/AI, enviado por ni más ni menos que el Gerente encargado del Órgano de Auditoría Interna de la misma Contraloría, Eduardo Rosales. En el documento se precisan una serie de hechos que podrían suponer situaciones de conflicto de intereses en la institución.

El memorando contiene una serie de acusaciones vertidas por redes sociales en las que se advierte la presencia de trabajadores de la institución entre los postulantes al Concurso de Méritos 02-2023-CG. Según Rosales Villanueva, existen trabajadores de la entidad que están postulando al concurso de méritos en plazas en las que se encuentran laborando actualmente.

“Tengo el agrado de dirigirme a usted, en atención a la información que viene circulando en redes sociales respecto a la postulación de colaboradores de la entidad a plazas que corresponden a la misma Unidad Orgánica a la que vienen prestando servicios”, dicta el inicio del documento enviado a Shack la semana pasada.

Serían 12 los trabajadores que habrían incurrido en conflicto de intereses

Tomando como base estas denuncias realizadas por redes sociales, Rosales Villanueva y el Órgano de Auditoría Interna realizaron una serie de revisiones que detallaron como “aleatorias” en el memorando. Como resultado de estas pesquisas, se pudo determinar la existencia de al menos 12 casos que cumplían con las denuncias. Doce trabajadores que estaban postulando a puestos en las mismas oficinas en las que trabajan actualmente.