Una deuda social con la juventud peruana
Por: Nancy Martínez
La situación de los jóvenes peruanos respecto al acceso al empleo formal y digno es un desafío urgente.
Según el Instituto Nacional de Estadística e Informática (INEI), la población joven, de 15 a 29 años, representa el 23.3% de la población nacional total. La falta de empleo incrementó la pobreza de los jóvenes en un 26% al 2022. El Informe Nacional de Juventudes 2021 revela que solo el 28% de los jóvenes tienen educación superior técnica o universitaria.
El Reporte Técnico del Estado de la Niñez y la Adolescencia de 2022 indica que el 19.7% de la población de 12 a 16 años no cuenta con educación secundaria por problemas económicos y familiares.
Asimismo, la Encuesta Permanente de Empleo Nacional de 2023 muestra una tasa de informalidad laboral juvenil (14 a 24 años) del 85.9% y una tasa de desempleo juvenil de 10.6%.
La falta de oportunidades laborales adecuadas para los jóvenes impacta negativamente en su calidad de vida económica, social y emocional, y estas cifras amenazan con ampliar las brechas sociales en el país. Resulta esencial seguir impulsando iniciativas destinadas a facilitar una transición efectiva posterior a la escuela que signifique un camino de realización para ellos, permitiéndoles el acceso a la educación, y fortalecer sus habilidades de empleabilidad y emprendimiento. Estos esfuerzos requieren de la intervención del Estado con políticas públicas que prioricen la vida de los jóvenes en su condición de ciudadanos y actores importantes en el desarrollo del país; del apoyo de la sociedad civil, comprometida en contribuir al cuidado, protección y empoderamiento de niñas, niños, adolescentes y jóvenes, así como de aportes del sector privado.
Atendiendo este propósito, Aldeas Infantiles SOS Perú, asociación que prioriza su atención a favor de niñas, niños y adolescentes que han perdido el cuidado parental o en riesgo, brinda acompañamiento a jóvenes en su transición a la adultez, contribuyendo a su educación superior e impulsando emprendimientos mediante alianzas con el sector privado para que tengan mejores oportunidades de inserción al mercado laboral. En este esfuerzo, se cuenta con el proyecto global YouthCan, un programa de fortalecimiento y desarrollo de capacidades para la vida y la empleabilidad de las personas adolescentes y jóvenes, una intervención con enfoque integral basada en los derechos humanos, que genera un cambio positivo y contribuye a la construcción de una sociedad más justa e igualitaria; el cual gracias a diferentes actividades, como la jornada anual solidaria “Gran Día” en alianza con Arcos Dorados Perú, que se realizará el 17 de noviembre, seguirá apoyando a un gran número de jóvenes.