Jaime Villanueva, el exasesor de Patricia Benavides, confirmó que la anterior titular del Ministerio Público coordinaba con el jefe de la Autoridad Nacional de Control (ANC), Juan Antonio Fernández Jerí, para sancionar a los fiscales que no se alineaban a sus objetivos. Si bien esta entidad es autónoma de la institución, por lo que no acepta intervención externa, depende económicamente de los fondos que administra la Fiscalía.

De acuerdo a Perú21, Villanueva afirmó, el pasado 2 de diciembre, que él trabajaba como mediador entre Fernández y Benavides para negociar la salida de Rafael Vela, coordinador del equipo especial Lava Jato, quien habría sido la primera víctima de esta maniobra.

El jefe de la ANC ya habría tomado la decisión de iniciar un proceso disciplinario en contra de Vela; no obstante, habría tenido algunas dudas de llevarla a cabo debido a una presunta amistad que Benavides tenía con el fiscal supremo.

El ‘filósofo’ le afirmó que sí había la intención de deshacerse de Vela, ya que este la criticó por apersonarse en la extradición del expresidente Alejandro Toledo. “(Patricia Benavides) no tenía que haber conversado (con Toledo) porque es un trámite de recepción”, había manifestado a los medios de comunicación.

Jaime Villanueva habría declarado que las reuniones con Fernández se realizaban en los exteriores del Ministerio Público. En citas afuera de la institución se ponían de acuerdo sobre la estrategia legal y detalles técnicos. De esta manera, no había evidencia de visitas oficiales o charlas en los pasillos.

Pero, ¿cómo se logró la salida de Vela? El fiscal fue separado durante ocho meses del cargo por unas declaraciones que dio en el 2020, cuando criticó a los jueces que liberaron a Keiko Fujimori. Tres años después, el fiscal Carlos Muñoz firmaría la resolución que confirmaba la sanción, en octubre de este año.

El segundo objetivo era la fiscal Marita Barreto, coordinadora del Equipo Especial de Fiscales Contra la Corrupción del Poder (Eficcop). La excusa iban a ser unas diligencias “irregulares” en el extranjero junto a la empresaria encarcelada Sada Goray.