Por: Carlos Meneses

Todavía el panorama político y el personal de la presidenta Boluarte no está suficientemente claro y el país está exigiendo conocer verdades.

La mayoría de peruanos está en desacuerdo con pensar que son satisfactorias las explicaciones dadas por la presidenta Dina Boluarte respecto a las investigaciones que realiza el Ministerio Público y que están relacionadas con los recursos económicos que evidencia tener la jefa de Estado. Esta situación se agrava por los 2 intentos de vacancia que se presentaron en el Congreso y que no tuvieron éxito, pero que ponen en situación incómoda la consideración que América y Europa tienen por nuestro país.

Durante 5 horas la mandataria procuró satisfacer las inquietudes de la Fiscalía, sin lograrlo plenamente, señalando que mantiene intactos los propósitos que anunciara sobre terminar su gestión presidencial y salir con las manos limpias del ejercicio del poder.

Queda mucho por esclarecer entre los ingresos que ella ganó como funcionaria del Reniec, luego como ministra de Pedro Castillo y finalmente como presidenta de la República. Existen cuentas por aclarar en lo que se refiere a ingresos y también por relojes, joyas y otros bienes de los que estaba obligada a informar anualmente.

Es de esperar que esta situación cambie y que se esclarezcan también las muertes registradas en el primer trimestre del año 2023, así como su intervención en los sucesos luctuosos entonces ocurridos y la actitud asumida, en ese tiempo, por la Policía Nacional y la Fuerza Armada del Perú.