Por: Germán Yuca Ch. 

Más de ocho años después de verse perjudicados por la construcción de la represa de Angostura, un grupo de 52 comuneros del anexo Pusa Pusa (Majes) continúa esperando por una reubicación. Según detallan, desde el Gobierno Regional de Arequipa (GRA) se comprometieron a brindarles un espacio en Pampa Baja (perteneciente a Majes Siguas I), pero aún no se efectúa el proceso de traslado y, lo que es peor, se pretende retirarlos de los terrenos en los que residen desde hace años. 

«Hay 52 familias tronco a las que se les está desarraigando de su lugar de origen. Por eso, se busca el traslado a Pampa Baja para que allí puedan rehacer su vida, tal como detalla el estudio de impacto ambiental. (…) Los comuneros transfirieron sus terrenos y habían compromisos mutuos, pero ya transcurrieron ocho años y hasta ahora desde el GRA no cumplen con el traslado. Razón por la que los comuneros se resisten a desocupar sus terrenos», sostuvo el abogado de las afectados de Pusa Pusa, Edgardo Rosales.

Durante la fase previa a la construcción de la represa de Angostura (parte del proyecto Majes Siguas II) se detectó que la zona de embalse de extendería por 43 kilómetros cuadrados (km2) del anexo Pusa Pusa (Caylloma); afectando a 52 familias que residían en dicha área. Para iniciar la construcción, desde la Autoridad Autónoma de Majes (Autodema) recomendaron la reubicación para dar continuidad al proyecto. No obstante, aún hacía falta concretar los acuerdos entre el gobierno regional y los 52 comuneros afectados. 

Según la Ordenanza Regional N° 339 CR Arequipa, promulgada el 19 de mayo del 2016, desde el Gore Arequipa se comprometieron a reservar la extensión de 506 hectáreas –ubicadas en el Asentamiento PB3 Pampa Baja de Majes– para los comuneros damnificados en Pusa Pusa. Este procedimiento debía efectuarse a la brevedad para culminar la construcción de la represa de Angostura, pero –tras diversas gestiones– aún no se concreta el proceso de reubicación. No obstante, desde Autodema ya exhortaron –en reiteradas oportunidades– a retirar a los ocupantes de los terrenos para culminar el proyecto. 

Uno de los comuneros afectados, Antonio Cruz, informó que esperan la entrega de terrenos, pero hasta ahora no se les otorga el espacio prometido. Razón por la que aproximadamente la mitad de los comuneros se resisten a dejar Pusa Pusa. De modo que la represa de Angostura permanece inconclusa y desde el GRA no hacen nada para concretar el resarcimiento.

Los comuneros aseguraron además que tenían una reunión con funcionarios del GRA para diciembre del 2023; no obstante, debido a la inasistencia de autoridades esta no tuvo lugar. El caso fue judicializado y se busca que se realice una venta directa en la que el Ejecutivo regional pagaría 5 mil dólares por hectárea de terreno. No obstante, este proceso continúa en curso y podría prolongarse por varios años más.