Incendios forestales en Arequipa fueron causados por intervención humana
A pesar de la disminución en la incidencia de incendios, el Servicio Nacional Forestal y de Fauna Silvestre (Serfor) advirtió que la Macro Región Sur sigue en alerta. Mientras no inicie oficialmente la temporada de lluvias, la región continúa en riesgo debido a prácticas como la quema de rastrojos, fogatas y colillas de cigarrillos. En Arequipa, el 100% de los incendios forestales tienen origen humano.
«Nuestras condiciones climáticas son distintas a las del resto del país. No habrá lluvias regulares hasta diciembre, aproximadamente. Por eso debemos mantener la cautela, insistir en la prevención y sensibilización de la población. (…) En nuestra región, el 100% de los incendios registrados fueron provocados por actividades humanas, a pesar de los decretos que prohíben la quema de rastrojos agrícolas», declaró el administrador técnico de Serfor en Arequipa, Luis Felipe Gonzales Dueñas.
El artículo 27, inciso 27 del Decreto Supremo N° 016-2012-AG, conocido como el ‘Reglamento de Manejo de Residuos Sólidos del Sector Agrario’, prohíbe la quema de residuos agrícolas en todo el país. Además, la Ordenanza Regional N° 487 del Consejo Regional de Arequipa refuerza esta prohibición en la región. Sin embargo, esta práctica no se detuvo y durante los últimos años provocó cientos de incendios a nivel nacional.
La responsabilidad de regular e impedir la quema de residuos agrícolas recae en los municipios y la Policía Nacional del Perú (PNP), mientras que la OEFA se encarga de supervisar específicamente la quema de caña de azúcar y arroz. Sin embargo, el factor social también influye. «Hay normas que cumplir, pero no basta con sancionar; es necesario ofrecer alternativas al agricultor. En este caso, debemos promover el compostaje de los rastrojos de cosecha y convertirlos en abono orgánico», afirmó González Dueñas.
Desde Serfor advirtieron que las zonas altoandinas, ubicadas por encima de los 2 mil 700 m.s.n.m., corren mayor riesgo de incendios forestales. En la región, solo Islay y Camaná están fuera de peligro, mientras que Caravelí, Castilla, Condesuyos, La Unión, Caylloma y Arequipa enfrentan un riesgo constante. Durante el 2024, las provincias más afectadas por incendios forestales fueron Caylloma, Arequipa y La Unión.