Castillo llama a Dina Boluarte: “La traidora y usurpadora”

EXPRESIDENTE EN LA BASE NAVAL DEL CALLAO

El expresidente Pedro Castillo, desde su encierro, arremetió contra la mandataria Dina Boluarte y las instituciones que lo apartaron del poder en diciembre de 2022. A través de una carta publicada ayer 6 de diciembre. Castillo calificó a la actual mandataria como una “traidora y usurpadora” y reiteró que su destitución fue parte de un “golpe de Estado perpetrado por la ultraderecha”, con el apoyo del Congreso, las Fuerzas Armadas y el sistema de justicia.

En el mensaje, Castillo defendió su controvertida declaración de disolución del Congreso, asegurando que no fue un acto de rebelión, sino un reflejo del “clamor del pueblo” por cerrar un Legislativo que consideraba dictatorial y por convocar a una consulta para una nueva Constitución. Además, afirmó que sigue siendo víctima de una persecución política.

LA CARTA

Castillo, quien permanece en prisión preventiva en la Base Naval del Callao desde diciembre de 2022, dirigió su mensaje tanto al pueblo peruano como a la comunidad internacional. En su misiva, denunció que el juicio oral por rebelión que enfrenta es una maniobra del Poder Judicial para sentenciarlo al margen de las leyes y silenciar su voz política. “Estoy con el pueblo y, dentro de él, soy realmente libre”, escribió, reafirmando su compromiso con lo que él considera una lucha por la democracia.

El expresidente también aprovechó para criticar la gestión de Dina Boluarte, destacando su baja aprobación, que según él no supera el 3%. La tildó de “asesina” por las muertes ocurridas en las protestas que siguieron a su destitución y la acusó de perpetuar un gobierno que traiciona al pueblo.

Además, Castillo se dirigió directamente a sus seguidores, agradeciéndoles por mantener viva la resistencia dentro y fuera del país, y resaltó la importancia de eventos como el Encuentro Nacional e Internacional por la Defensa de la Democracia, organizado en su honor.

GOLPE DE ESTADO

El contexto de esta carta no puede entenderse sin recordar el caos político que se desató el 7 de diciembre de 2022. Ese día, Castillo anunció la disolución del Congreso y la instauración de un “gobierno de excepción”, en un acto que fue inmediatamente calificado como un golpe de Estado. Sin apoyo de las Fuerzas Armadas ni de la Policía Nacional, su gobierno colapsó en cuestión de horas.

El Congreso aprobó su destitución por incapacidad moral con 101 votos a favor, y Castillo fue detenido, mientras intentaba llegar a la Embajada de México para solicitar asilo. Desde entonces, enfrenta cargos por rebelión y conspiración, además de otras acusaciones por presuntos actos de corrupción durante su mandato.

La vicepresidenta Dina Boluarte asumió la Presidencia el mismo día, convirtiéndose en la primera mujer en liderar el país. Sin embargo, su gestión ha estado marcada por protestas generalizadas, especialmente en las regiones del sur, donde las demandas por una nueva Constitución y el cierre del Congreso persisten con fuerza.

La figura de Pedro Castillo sigue dividiendo al país. Para sus detractores, es responsable de haber llevado al Perú al borde del caos institucional. Para sus seguidores, es una víctima de los poderes fácticos que nunca permitieron que su gobierno, que representaba a los sectores populares, prosperara.

Con su carta, Castillo busca mantenerse vigente en el panorama político, apelando a una narrativa que mezcla resistencia, denuncia y lucha social. Mientras tanto, las divisiones que se intensificaron durante su gestión y su destitución siguen presentes.

Deja un comentario