El legado de Narciso Aréstegui: la novela “El padre Horán”

Por: Jhon Delgado Galván
REFLEXIONES
La Biblioteca Nacional del Perú (BNP) es la institución responsable de defender y proteger el material bibliográfico documental declarado Patrimonio Cultural de la Nación (PCN), así como de gestionar y proponer a obras literarias que, por su valor y relevancia para el desarrollo histórico y cultural del país, ameriten este reconocimiento especial. En esa línea resulta importante destacar la reciente declaratoria realizada por el Ministerio de Cultura de seis unidades bibliográficas, en tres volúmenes, de la obra El padre Horán: (escenas de la vida del Cuzco) (1848) de la producción intelectual de Narciso Aréstegui Zuzunaga, bienes culturales custodiados por la BNP.
Esta declaratoria significa el reconocimiento de la nación a la primera obra escrita por Narciso Aréstegui Zuzunaga (1820-1869), quien fue un destacado escritor y político peruano nacido en Huaro, Cusco, que se instruyó en el Colegió Nacional de Ciencias y Artes del Cusco y, posteriormente, se graduó de abogado en la Universidad de San Antonio Abad del Cusco.
Con una vida marcada por la agitación política y militar de las primeras décadas del Perú republicano, donde se aventuró en diferentes campañas, levantamientos y rebeliones, Aréstegui escribió su obra en 1848, la que inicialmente fue publicada por capítulos como novela de folletín en el diario El Comercio, entre agosto y diciembre de dicho año, para luego ser editada en forma de libro, en seis tomos.
La novela, que tiene como escenario a Cusco en el contexto de la instauración de la Confederación Peruano-Boliviana, nos relata un caso de violencia y opresión que marcó a esta ciudad en 1836, protagonizado por los personajes del padre Horán y la joven Angélica.
Así, la obra presenta los abusos y la aguda pobreza que sufrían los indígenas en el Cusco, a mediados del siglo XIX, por lo que es considerada una novela precursora del indigenismo, al ser de los primeros textos republicanos que expone la problemática indígena (Stagnaro, 2021).
Diversos intelectuales señalan que esta novela causó furor en su época, siendo una de las más importantes en el año de su publicación, y que habría significado un mayor número de suscriptores al diario El Comercio (Velásquez, 2004), que había sido fundado en 1839 por Manuel Amunátegui y Alejandro Villota.
Los bienes declarados, además, pertenecen al Fondo Antiguo de nuestra institución bicentenaria, siendo uno de los pocos repositorios bibliográficos que cuentan con la colección completa de la obra.
Su declaratoria como Patrimonio Cultural de la Nación, según la Ley General del Patrimonio Cultural de la Nación, Ley N° 28296 y sus normas modificatorias, contribuye a asegurar que esta obra reciba protección legal para su defensa y protección, con estrategias para evitar su deterioro, pérdida o tráfico ilícito.
Este reconocimiento contribuye a redoblar los esfuerzos que realiza la Biblioteca Nacional del Perú para promover la difusión, accesibilidad, apropiación e investigación de las obras declaradas Patrimonio Cultural de la Nación, medidas que realiza para garantizar la preservación del patrimonio bibliográfico nacional para el disfrute cultural de las presentes y futuras generaciones de peruanos y peruanas.