Los cambios en la Iglesia
Por: Carlos Meneses
Los peruanos hemos recibido como propio al cardenal Roberto Prevost que se llamará en el futuro León XIV y las campanas llamaron al repique para destacar su elección en el segundo día del cónclave realizado en la Capilla Sixtina
Desde que asumió el pontificado el -ahora fallecido- papa Francisco, realizó una serie de importantes cambios en el manejo de la Iglesia católica y todo indica que serán confirmados por el recién elegido papa Robert Prevost, quien escogió el nombre de León XIV para gestión que se producirá el lunes próximo en una conferencia de prensa donde fijará las condiciones de su nueva tarea.
El papa quien tiene 69 años, ha vivido 40 de ellos sirviendo como misionero agustino en el Perú y ocho como obispo de Chiclayo al nacionalizarse peruano y declarar su afecto por su trabajo en Tumbes, Piura y la capital de la región Lambayeque.
Los temas que preocupa a la Iglesia son las guerras, el hambre y la miseria que afecta a gran número de niños, mujeres y varones. La Iglesia afronta una situación difícil, pero que de seguro podrá sobrellevarla como ha ocurrido en los últimos 2 mil años.
Para los peruanos la elección de Robert Prevost tiene un significado muy especial. Él nació en Estados Unidos se nacionalizó peruano cuando lo invitaron a dirigir la Diócesis de Chiclayo, a la que ha dedicado, en perfecto castellano, su afecto muy especial por la colaboración recibida y por el amor mutuo que se despertó entre el misionero agustino y la feligresía del pueblo que recorrió durante años llevando un mensaje de fortaleza y de afecto.
Él tiene el corazón de los peruanos y también la confianza de una población que cree en María y que inspiró la votación cardenalicia en favor de una confirmación de nueva Iglesia que busca la paz en el mundo entero.
