Disputa por custodia de menor termina en dolorosas escenas
Diligencia tuvo que concretarse en la comisaría.
Ayer en Arequipa, un hecho conmovió a quienes presenciaron una diligencia judicial en un colegio en el distrito de José Luis Bustamante y Rivero. Una niña de apenas cinco años, entre sollozos y abrazos desesperados, se negó a regresar con su madre, pese a la orden del juez Javier Calderón Beltrán del II Juzgado de Violencia del Módulo de Paucarpata que había dispuesto la restitución de la custodia.
La menor, hija de padres separados, arrastra una historia marcada por denuncias de maltrato psicológico y físico presuntamente cometidos por su progenitora, de nacionalidad venezolana. El padre, quien actualmente tenía a la niña bajo su cuidado, presentó pruebas ante la justicia con la esperanza de protegerla. Sin embargo, el magistrado insistió en que la custodia debía retornar a la madre, Emilse Zambrano Medina, ciudadana de nacionalidad venezolana.
En cumplimiento de esta decisión, el magistrado, acompañado por la fiscal y efectivos policiales, se presentó en la institución educativa donde la pequeña cursa el nivel inicial. El objetivo era que el padre entregue a la niña. Pero la escena terminó siendo profundamente dolorosa: la menor rompió en llanto, se abrazó con fuerza a su padre y gritó que no quería irse. La resistencia fue tan evidente que la diligencia no pudo concretarse y se trasladaron a la comisaría de José Luis Bustamante, pero al no lograr un acuerdo y ante la imposibilidad de ejecutar la orden, se dispuso que la niña fuese trasladada a la Unidad de Protección Especial (UPE), donde permanecerá bajo resguardo temporal y se le realizará los exámenes pertinentes, mientras se define qué ocurrirá con su custodia.
Vecinos y personas cercanas a la familia han expresado indignación, cuestionando hasta qué punto la justicia está escuchando la voz de una niña, junto a su padre y su familia claman por su protección y seguridad.
“El caso genera preocupación no solo por la salud emocional de la niña, sino también por las decisiones judiciales que, pese a las denuncias y la pruebas feacientes de maltrato que se presentaron, han priorizado el derecho de la madre por encima del bienestar que la menor,quien manifiesta ser maltratada en reiteradas oportunidades por su progenitora”, aseveró la abogada Giovana Sumire Itusaca.
Mientras tanto, la historia de esta pequeña arequipeña recuerda la vulnerabilidad de los niños frente a conflictos de los adultos y la necesidad urgente de que las instituciones encargadas velen, por encima de cualquier formalidad, por lo más importante: el interés superior del niño.
