Por: Abner Trujillo Romero

Hace cuatro meses, el presidente Pedro Castillo presentó ante el Congreso el Proyecto de Ley que crea el Ministerio de Ciencia, Tecnología e Innovación.La pandemia por covid-19 reveló el profundo retraso científico que padece nuestro país. Una situación crítica, consecuencia de la cual peruanos con las mentes científicas más brillantes han debido migrar en búsqueda de mejores oportunidades formativas y laborales.

Pese a todos los buenos intentos del Consejo Nacional de Ciencia, Tecnología e Innovación (Concytec), lo cierto es que la ciencia, tecnología e innovación, todavía no son un pilar central de la vida económica y productiva nacional. Las políticas de Estado impulsadas en materia de ciencia, tecnología e innovación (CTI) hasta ahora son insuficientes.

Muchos se han preguntado cómo Corea del Sur, un país pobre con un ingreso per cápita de 1,342 dólares en 1960, logró tener un PBI per cápita de 34,744 dólares para el 2021 y convertirse en uno de los principales exportadores de productos tecnológicos en el mundo; mientras tanto, el Perú, con todos los recursos disponibles, registra un ingreso per cápita de apenas 6,888 dólares para el 2021 y mantiene aún una economía primario-exportadora.

No se trata de un milagro económico. Como sostiene el Instituto Coreano de Desarrollo (2010), cuando Park Chung-hee llegó al poder en 1961 adoptó una estrategia de crecimiento impulsada por el gobierno con miras a constituir la base industrial de la República de Corea. En ese contexto, Corea del Sur creó el Ministerio de Ciencia y Tecnología en 1967. Desde entonces, por medio de este organismo ejecutan políticas para el desarrollo científico y tecnológico de Corea.

Esta experiencia exitosa ha sido impulsada también por países latinoamericanos como Argentina, Chile, Colombia, Brasil y Costa Rica, los cuales tienen sus respectivos entes rectores de las políticas nacionales en materia de ciencia, tecnología e innovación, con rango de ministerio.

Hace cuatro meses, el presidente Pedro Castillo presentó ante el Congreso el Proyecto de Ley que crea el Ministerio de Ciencia, Tecnología e Innovación, mediante el cual espera articular la educación y la ciencia con los procesos productivos del país, superando el modelo primario exportador actual. Así, sin dejar de lado los aspectos positivos del Concytec, se podría contar con un órgano estatal con capacidad política para estimular el desarrollo científico y promover la creación de una vasta comunidad científica nacional, haciendo que los más brillantes investigadores retornen para contribuir con el progreso de la patria.

El Poder Ejecutivo ya hizo su parte. La aprobación del Proyecto de Ley Nº 1202/2021-PE depende ahora del voto de los señores congresistas de la República. Llevamos 55 años de atraso frente a Corea del Sur y otros tantos respecto de países latinoamericanos, es tiempo de dar un gran salto hacia adelante.