‘Vaguito’: ¿Lo positivo también vende en el Perú?
Por: Zara Arka
A poco más dos semanas de su estreno, la película peruana Vaguito ha logrado el primer lugar de la taquilla, superando los 600,000 espectadores –casi 15 estadios Nacional llenos– , proyectándose superar a películas con un mayor respaldo presupuestal como Vivo o muerto, Chabuca, La piel más temida, Yanahuara y otras, que se pensaba iban a liderar la taquilla.
Muchos se preguntan ¿a qué se debe este fenómeno? ¿Es solo una “golondrina”? o ¿estamos realmente ante un cambio de tendencias en la actitud del consumidor frente a películas con mensajes positivos sobre valores, amor por los animales, fidelidad y solidaridad? ¿Los publicistas y broadcaster deberían tomarla en cuenta para promover películas de este corte, más allá del morbo o la violencia en pantallas? ¿El mensaje positivo también vende?
Considero que hay cuatro factores que explicarían este éxito. Primero, recoge de nuestra propia realidad un mensaje muy potente. Es un relato conmovedor de los valores más puros y atemporales, entre el ser humano y un animal, como la lealtad y el amor incondicional. Por medio de una historia sencilla, el espectador es llevado en un viaje emocional que les hace reír, llorar y, sobre todo, reflexionar sobre el cuidado responsable frente a la adopción de una mascota y el valor de la fidelidad. Quizá esto explique por qué familias enteras abarrotaron los cines, especialmente niños.
Segundo, la película logró involucrar a personas de la propia comunidad de Punta Hermosa y de albergues locales, las que participaron en escenas como verdaderos actores. Esto logró que se extendiera luego el mensaje “boca a boca” y explotara en redes sociales. Tercero, el poder de las redes sociales y los medios. Salvo críticas aisladas, el respaldo a la película ha sido unánime. La buena comunicación de los actores, incluyendo a “Vaguito entrevistado”, y del propio director, fue muy importante. La película logró recibir múltiples muestras de apoyo y solidaridad. Las redes sociales se inundaron de mensajes de espectadores conmovidos que compartieron sus experiencias personales y el impacto emocional que la película les generó.
Y cuarto, también influyó el hecho de haber competido simultáneamente con otras películas peruanas con una mayor inversión actoral. La sencillez de los actores de Vaguito, la apuesta por un tema emotivo, familiar, cotidiano y el empuje del público para que una película de este tipo no quede desplazada, también hicieron lo suyo.
En un mundo lleno de caos y turbulencias, películas como Vaguito traen una esperanza, un aire fresco y un recordatorio reconfortante de que, a pesar de las múltiples crisis que enfrentamos, sentimientos como el amor y valores como la lealtad, pueden estar aún, por encima de todo. Es una obra que resuena en el corazón de todos aquellos que hemos experimentado esa conexión especial con nuestra mascota.