Por: Carlos Meneses

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“Los candidatos deben presentar programas, hacer estudios para plantearlos al ciudadano elector y mayor fragmentación no acudirá en ayuda de una buena elección”.

No serán menos de 20 los ciudadanos arequipeños que por partidos nacionales o movimientos regionales participarán en la elección de octubre próximo para elegir entre ellos al alcalde y regidores de la Municipalidad Provincial de Arequipa

La fragmentación que puede observarse hoy en el Legislativo de 10 bancadas dificulta mucho los entendimientos, el proceder y acción de las agrupaciones políticas o de manera de pensar diferentes sobre la forma de resolver los problemas que nos dejan las crisis producidas como consecuencia de la pandemia, de la guerra europea, del precio del petróleo y de los alimentos en general.

Este fraccionamiento es enemigo de la unidad a la que se llega mediante el diálogo y el convencimiento sobre lo que es mejor hacer en momentos difíciles como los actuales. También será muy importante la contribución que deberán hacer todos los que puedan aportar para iluminar mentes y ablandar corazones.

El papel de los profesionales será vital y el de los jóvenes emprendedores mayor, aun pues, los requerimientos de empleo durarán años para ser satisfechos y prometedores.

Escoger entre muchos es confundir a quien ante un ánfora de sufragio tenga que depositar un voto definitorio, limita las posibilidades de conocimiento, de difusión de programas y de esclarecimiento de realidades. La ausencia de partidos y de líderes institucionales es evidente y solo puede ser remplazada por una forma de agrupamientos ciudadanos que tengan una perspectiva clara, definida sobre lo que debe hacerse en economía como en desarrollo.