Por Jorge Turpo Rivas

El presidente del Frente de Defensa de Transportistas de Arequipa, Víctor Mendoza, dijo que se rompió el diálogo con el gerente de Transportes, Miguel Santa Cruz, por eso piden que Víctor Hugo Rivera los atienda para evitar paralización desde el 23 de agosto.

AUTORIDADES DE MPA REITERAN QUE NORMAS DEBEN CUMPLIRSE

Tras el fracaso de la mesa técnica donde se trataba la problemática del transporte informal en la ciudad, el Frente de Defensa de Transportistas de Arequipa (FEDETRA) demanda dialogar con el alcalde provincial, Víctor Hugo Rivera y buscar solución a los problemas del transporte urbano.

El presidente del FEDETRA, Víctor Mendoza, indicó que el último lunes presentaron el documento a mesa de partes de la municipalidad explicando al alcalde las razones por las cuales ya no pueden seguir dialogando con el gerente de Transportes, Miguel Santa Cruz, y le piden una reunión directa.

“Nos sentimos engañados, hemos asistido tres meses a la mesa técnica y sólo se trató un punto, el del desabastecimiento de unidades en el SIT, pero el señor Santa Cruz en su informe niega que haya desabastecimiento, eso es una burla para nosotros porque quiere negar una realidad que la vemos todos, por eso queremos dialogar de manera directa con el alcalde”, dijo Mendoza.

Agregó que esperan la respuesta del alcalde antes de las fiestas de aniversario de la ciudad porque fueron pacientes en acudir a todas las reuniones de la mesa técnica donde perdieron tres meses.

“No se llegó a nada y aún así nosotros seguimos confiando en el diálogo, por eso queremos que el alcalde nos reciba antes de las fiestas porque se trata de un problema que no puede esperar. Caso contrario haremos nuestra paralización desde el 23 o 25 de agosto, según se defina en nuestra asamblea del 20 de agosto. Ojalá el alcalde entienda que esto no es juego, a veces parece que lo toma así, como un juego”, destacó.

El FEDETRA agrupa a 36 empresas de transporte informal que operan diferentes rutas en la ciudad con más de 7 mil unidades.

En mayo realizaron una marcha rodante desde la avenida La Marina y en la plaza Mayta Capac generando un gran caos vehicular en todo el Centro Histórico y alrededores.

“Esa vez sólo sacamos el 30% de nuestras unidades, ahora saldríamos todos. Estamos agotando todas las instancias. Aceptamos acudir a la mesa técnica donde el alcalde dijo que asistiría, pero no estuvo en ninguna de las reuniones”, apuntó.

El pedido central de los transportistas informales es que la municipalidad les conceda un permiso extraordinario para prestar el servicio en las rutas que no cubre el SIT.

Desde el distrito de Cayma, por ejemplo, hace varios meses se planteó un nuevo plan de rutas para que sean cubiertas por el SIT y por las unidades informales. Sin embargo, recién la gestión de Rivera programó una reunión para este lunes 12 de agosto donde se discutirá esa propuesta.

“Las empresas del SIT se oponen a ese plan indicando que nosotros circulamos por sus rutas, pero eso es falso. Por ejemplo, las unidades de mi empresa van por la ruta de la Quebrada de Tucos que ninguna empresa del SIT cubre. Nuestras 150 unidades van por las chacras, parten desde La Tomilla llegan a Bolognesi y se van al terminal pesquero de Río Seco, no molestamos a empresas del SIT como Transcayma”, comentó Mendoza.

El dirigente contó que el 20 de agosto se realizará una asamblea general de las 36 empresas que representa y decidirán si la paralización se realiza el 23 o 25 de agosto.

“Hay la propuesta de esas fechas, tenemos que someterlas a la opinión de nuestros agremiados, pero todo dependerá también de la respuesta del alcalde. Reitero, esto no es un juego, nosotros queremos una solución real”, apuntó.

El gran problema para las unidades del transporte informal es que mientras no tengan un permiso extraordinario les seguirán aplicando papeletas y además seguirán cubriendo las rutas con unidades pequeñas como las denominadas “loncheritas”.

Voceros de la Municipalidad Provincial de Arequipa reiteran que mediante el diálogo buscarán solución a

a los problemas de un transporte informal, inseguro y contaminante, que causa mucho daño a la población.