Ayer, la Gerencia de Fiscalización Municipal de José Luis Bustamante y Rivero clausuró la oficina de la empresa de transportes Caminos del Inca, ubicada en el terminal de minivanes de Gratersa. Según las autoridades, el local estaba autorizado para operar como oficina administrativa, pero se usaba para vender boleta de viajes.

La intervención fue liderada por personal de fiscalización municipal, quienes verificaron el uso indebido del giro comercial. Dado que el espacio debía funcionar como oficina, pero se usaban como terminal terrestre de las minivanes, incumpliendo la normativa vigente.

«Iniciaremos un proceso administrativo sancionador contra la empresa Caminos del Inca para aplicar las sanciones correspondientes en coordinación con Sutran. En cuanto a nosotros, constatamos que el local funcionaba como terminal sin contar con la autorización requerida», declaró Fredy Zegarra Black, alcalde distrital de José Luis Bustamante y Rivero.

No es la primera vez que la empresa enfrenta problemas regulatorios. El pasado 12 de diciembre, la Superintendencia de Transporte Terrestre de Personas, Carga y Mercancías (Sutran) ya había intervenido las instalaciones por operar sin el certificado de habilitación necesario para funcionar como terminal terrestre.

Tras la clausura, se colocaron bloques de concreto en el ingreso del local para impedir su uso. Las autoridades