Por: Dany La Torre

El Gobierno Regional de Arequipa (GRA) viene preparando estrategias que permitan establecer nuevas condiciones de diálogo con los principales representantes de gremios y asociaciones de la sociedad civil de la región a fin de evitar una mayor convulsión social. El jefe de la Oficina de Diálogo y Gobernabilidad, Luis Ortiz Peralta, indicó que parte de esta etapa incluiría abordar reuniones individuales que permitan encontrar ‘puntos nodales’ en medio de la crisis social y política.

IMPLEMENTARÁN “DIÁLOGOS REGIONALES”

“Nuestra propuesta y alternativa no es las acciones de fuerza, sino las acciones de consenso. En esta perspectiva estamos trabajando para poder instalar estos espacios de diálogo regional con diferentes representantes de gremios y asociaciones de la sociedad civil y donde nuestro gobernador (Rohel Sánchez), como representante de la Asamblea Nacional de Gobiernos Regionales (ANGR) ha dado a conocer a través de un pronunciamiento la voluntad de encontrar estos espacios”, explicó.

En ese sentido, los objetivos de la oficina se abocarán en generar las condiciones necesarias para un clima de confianza con los principales actores sociales en medio de estas protestas. Con ello, los nuevos espacios tendrán una hoja de ruta estratégica para proponer acuerdos viables que permitan la paz social en la región.

Ortiz recordó que, a través de su despacho, se han venido desarrollando reuniones individuales con representantes de Construcción Civil y comerciantes de Arequipa. Esta medida continuará a fin de encontrar los principales puntos de reclamo que mantiene la población que se encuentra a favor de las protestas. Luego se podrá realizar una mesa de trabajo con mayor amplitud que involucre a los principales actores sociales.

«Buscamos un proceso que tenga los pies firmes, que pueda generarse con la mayor legitimidad, estamos abocados a generar esas condiciones para generar estos diálogos regionales que hacía mención y que nuestro gobernador ha mencionado en un pronunciamiento público. Hay una planificación que nos permita tener una relación directa con los diferentes actores colectivos», explicó señalando que el pedido de los comerciantes fue trasladado hasta la PCM por parte del gobernador regional.

El funcionario detalló que si bien no existe la voluntad explícita de conversar por parte de algunos representantes sociales, se viene llamando a la reflexión y articulando esfuerzos para lograr ello. Además, indicó que parte del problema es que no existe una representación unívoca de las protestas.

“Trabajamos para tener las condiciones y que las reuniones se den con la mejor legitimidad y que sean espacios que contribuyan al fortalecimiento de la institucionalidad democrática (…) luego de rondas de reuniones individuales, esperamos generar condiciones que permitan diálogos regionales con participación de los gobiernos regionales y la Asociación de Universidades Nacionales del Perú (AUNAP)”, aclaró.

Respecto a la paralización anunciada por el Frente Nacional de Transportistas y Conductores (FNTC) desde el 2 de marzo, indicó que es un derecho de las personas realizar actos de movilización o protestas, aunque esto debe darse según el marco normativo vigente.

«Nosotros tenemos conocimiento que el Sindicato de Choferes Camioneros de Arequipa y la Asociación de Choferes Cebolleros de Arequipa no van a participar de este paro», añadió.

CRISIS REPRESENTATIVA

El también magíster en Ciencia Política y Gobierno, explicó que el problema que existe en el país está referido a una ‘crisis de la democracia representativa’ que data desde hace varios años. “La crisis viene de años atrás tuvimos 6 presidentes en los últimos años. En ese contexto hay que ver la hostilidad política que se viene acumulando”, dijo explicando que este panorama se observa también desde un escenario mundial.

De otro lado, advirtió el destino que tuvieron las dos últimas autoridades y a partir de ese análisis hay que ver el concepto que tiene la población de las autoridades que antecedieron a las actuales.

“Hay un proceso de años anteriores que genera una especie de animadversión a la clase política. Esto se evidencia en las últimas encuestas a nivel nacional, donde se tiene una aprobación del 6% en el Legislativo. Eso da una percepción sobre lo que piensa la población de la clase política en general”, dijo.