La ofensiva rusa en Ucrania se intensifica pese a negociaciones
— Redacción Diario El Pueblo —
La ofensiva rusa en Ucrania se intensificó ayer, con una serie de bombardeos en Kiev, pese a las negociaciones y a una concesión importante del presidente ucraniano, que se dijo dispuesto a renunciar a su intención de adherir a la OTAN.
Cuatro personas murieron en el bombardeo de un edificio de 15 plantas del distrito de occidental de Sviatoshin, dijeron los servicios de rescate en Kiev.
«Todo tembló con fuerza. Me levanté, mi hija corrió y me preguntó: ‘¿Estás viva?’ Pero en una de las habitaciones no podíamos sacar a mi yerno y a mi nieto, así que rompimos las puertas y pudieron salir», relató a la AFP Lyubov Gura, de 73 años, que vivía en el piso 11.
Otro edificio de nueve plantas fue alcanzado en el distrito de Podil (noroeste), más cerca del centro de la ciudad, y hubo un herido.
La víspera, en el límite noroeste de la capital, Pierre Zakrzewski, camarógrafo de Fox News, murió, y su colega Benjamin Hall resultó herido, informó el martes la cadena estadounidense.
Alrededor de 29.000 personas fueron evacuadas de varias ciudades asediadas en toda Ucrania en solo la jornada del martes, según Kirilo Timoshenko, jefe adjunto de la administración presidencial.
Las evacuaciones se han acelerado en la asediada ciudad portuaria de Mariúpol (sur de Ucrania), donde más de 2.100 personas han muerto desde que comenzó la invasión rusa el 24 de febrero, según las autoridades locales.
«Hoy, unas 20.000 personas han salido de Mariúpol en autos particulares utilizando un corredor humanitario. Unos 4.000 coches salieron de la ciudad», precisó.
— Redacción Diario El Pueblo —
TOQUE DE QUEDA
El alcalde de Kiev, Vitali Klichkó, declaró un toque de queda de 35 horas a partir de las 20H00 horas (18H00 GMT) del martes por el momento especialmente «peligroso» que vive la capital, donde al menos la mitad de la población ya ha huido.
En la gran ciudad de Dnipró, en el este, relativamente intacta hasta ahora, el aeropuerto fue bombardeado el martes y provocó una «destrucción masiva», según su alcalde, que no mencionó víctimas por el momento.
En casi tres semanas de conflicto, más de tres millones de personas han huido de Ucrania, sobre todo hacia Polonia, según la Organización Internacional para las Migraciones (OIM). De ellos, 1,4 millones de niños, es decir «casi un niño por segundo», según Uniceef.
El presidente ucraniano, Volodimir Zelenski denunció que desde el inicio de la invasión han muerto 97 niños en bombardeos rusos contra «escuelas, hospitales, viviendas».
Este martes, desafiando los ataques, llegaron por tren a la capital ucraniana los primeros ministros de Polonia, Mateusz Morawiecki; de la República Checa, Petr Fiala; y de Eslovenia, Janez Jansa, y se reunieron con Zelenski y el primer ministro ucraniano, Denys Shmygal.
«Están bombardeando por todas partes. No sólo en Kiev, sino también en las zonas occidentales», les dijo Zelenski, según un vídeo publicado en su cuenta de Telegram.
«Debemos detener esta tragedia que se desarrolla en el Este lo antes posible», escribió el jefe de gobierno polaco, Mateusz Morawiecki, en Facebook.
El viceprimer ministro (polaco) Jaroslaw Kaczynski, dijo la noche del martes en Kiev que Polonia pide una «misión de paz» de la OTAN, «protegida por las fuerzas armadas», para ayudar a Ucrania.
NEGOCIACIONES SEGUIRAN HOY
La visita coincide con la reanudación de la cuarta ronda de conversaciones ruso-ucranianas, que comenzaron el lunes y continuarán el miércoles.
«Es un proceso de negociación complicado y extremadamente laborioso. Hay profundas contradicciones. Pero, por supuesto, es posible un compromiso», dijo en Twitter Mykhailo Podoliak, negociador y consejero de Zelenski.
Las conversaciones se celebran por videoconferencia después de tres rondas cara a cara en la vecina Bielorrusia y una reunión el jueves en Turquía de los jefes de la diplomacia rusa y ucraniana.
Por su parte, el ministro de Relaciones exteriores turco, Mevlut Cavusoglu, viajó a Rusia este martes y luego irá a Ucrania para participar en conversaciones en busca de un cese el fuego, afirmó el martes el presidente de Turquía, Recep Tayyip Erdogan.
El Kremlin consideró prematuro cualquier «pronóstico», después de que un consejero de la presidencia ucraniana considerara posible un acuerdo de paz antes de «finales de mayo».