Por Orlando Cáceres V.

El gerente de Desarrollo Urbano de la MPA, Jim Cornejo Cáceres, indicó que el proyecto todavía no lo revisaron las autoridades correspondientes para que su dependencia otorgue la licencia correspondiente.

Aún no deciden que hacer con el proyecto. El gerente de Desarrollo Urbano de la Municipalidad Provincial de Arequipa (MPA), Jim Cornejo Cáceres, indicó que, pese a que se hizo llegar reiteradas solicitudes a la Dirección Desconcentrada de Cultura (DDC), el Instituto Municipal de Planeamiento de Arequipa (Impla) y el Colegio de Arquitectos, estos todavía no emiten su pronunciamiento para definir el destino del proyecto Residencial La Recoleta. De acuerdo a los documentos mostrados, la empresa Alferza presentó los primeros folios en el año 2021 a las entidades referidas.

Como se recuerda, el mes pasado se dio a conocer que la empresa privada todavía no contaba con las autorizaciones correspondientes para el proyecto residencial La Recoleta, pese a que tenían un anteproyecto aprobado. No obstante, este no se pudo dar porque el presidente de la comisión técnica y exgerente del Impla, Francisco Ampuero Bejarano, estaba inhabilitado para ejercer cargos públicos por tres años desde el 4 de diciembre del 2019; el delegado Ad-hoc de la DDC, Mario Torres Pérez, presentaba presunto conflicto de intereses porque desarrolló la memoria histórica del proyecto; y porque las edificaciones no respetaban las alturas y volúmenes correspondientes al paisaje urbano y natural que está en la Ordenanza Municipal N° 115-2021. Sin embargo, la compañía presentó el año pasado el Expediente N° 10084-2022, en el que subsanaban algunas de las observaciones.

Cornejo Cáceres explicó que su dependencia emitió cuatro pedidos (dos durante su gestión) a la DDC, y uno al Impla y al Colegio de Arquitectos. En el caso de los que se envió a la dependencia del Ministerio de Cultura durante la gestión del arquitecto, uno se emitió el 22 de agosto bajo la firma del Subgerente de Obras Públicas y Edificaciones Privadas de la MPA, José Luis Ytuza Pacheco; mientras que el resto de documentación se emitió tres días después por parte del gerente. 

Por su parte, el funcionario explicó que la licencia debe emitirse después de la autorización de esta comisión. Es decir, los integrantes de esta comitiva tienen que dar a conocer sus opiniones profesionales para constatar que el proyecto se realice. Pues, uno de los vecinos, Carlos Rivas Sastre, denunció que estos edificios vulnerarían el estado de Patrimonio Cultural de la Humanidad que tiene la Ciudad Blanca, ya que está en la zona de amortiguamiento, cercana al Monumento Histórico Tambo de Ruelas.

“La municipalidad lo que hace, sobre esa base técnica, es concluir un procedimiento administrativo (…) No realizamos nada técnico, porque eso ya se revisó. Nosotros verificamos que se cumplan con los requisitos del TUPA. Estos involucran la revisión referida anteriormente que es ajena al municipio porque la conforman otras entidades”, explicó el servidor estatal.

CONTROL POSTERIOR

Asimismo, Jim Cornejo indicó que la obra podría ser sometida a un control posterior pese a su aprobación. Este se lleva a cabo cuando existen quejas respecto a las obras, las cuales están previstas para este proyecto.

“La ley establece que para la ejecución de las obras debe haber un inspector municipal de obra, acreditado por los colegios profesionales de Ingenieros y Arquitectos, para verificar que la ejecución esté conforme a la licencia aprobada. Este nos refiere alguna irregularidad, o cuando se comete algún ilícito. Estos son indicios que nos permiten avalar un proceso de control posterior”, acotó Cornejo Cáceres.