“La recesión provocará alza de precios de papa, ajo, cebolla y otros productos básicos”
Por Jorge Turpo Rivas
El dirigente sostiene que el sector agrario está en recesión hace dos años y medio desde la crisis de los fertilizantes y las consecuencias las terminarán pagando las familias más vulnerables si no se toman medidas urgentes que no sea la entrega de bonos.
Fenómeno del Niño afectará los cultivos de ajo.
El impacto de la recesión económica en el agro puede terminar afectando directamente a las familias más vulnerables. Habría escasez de productos de la canasta básica y los precios se incrementarían hasta hacerlos inaccesibles para muchas familias, es la advertencia que hace Daniel Lozada, presidente de la Sociedad Agrícola de Arequipa (SADA).
“Los agricultores estamos en recesión hace dos años y medio, desde la crisis de los fertilizantes, pero el gobierno recién se acaba de enterar y las consecuencias pueden ser dramáticas si no se dictan medidas urgentes y efectivas”, dijo.
En ese escenario, agrega Lozada, la crisis económica más el impacto del Fenómeno El Niño puede provocar que el precio de la papa, el ajo, la cebolla y el maíz se incrementen de manera considerable porque actualmente no se está sembrando a los niveles de campañas anteriores.
“Ya nos han reducido la dotación de agua, por ejemplo: en estos meses en mi irrigación, Santa Rita de Siguas, recibíamos hasta 2 mil litros de agua por segundo, ahora estamos sólo con mil 200 litros, eso nos obliga a que sembremos menos productos”, explicó.
La reducción de la dotación de agua en la cuenca del río Chili se estableció ante la posible sequía que provocaría El Niño.
La situación es mucho más complicada en valles como Tambo y Caravelí donde tienen menos agua y con alto contenido de metales pesados.
A ello se suma las altas temperaturas que se soporta en la ciudad y en los valles que genera la proliferación de hongos de suelo, raíces y hojas que provocan la reducción del área sembrada.
“Y el riesgo mayor está en zonas como la primera etapa del proyecto Majes donde el canal principal está seriamente dañado y desde el gobierno regional no se hace nada para repararlo, tiene quince puntos críticos donde hay rajaduras. Son 28 mil hectáreas que se perjudicarían si el canal colapsa”, comentó Lozada.
Todavía no se sabe con certeza lo que puede generar El Niño porque algunos pronósticos señalan que provocará una sequía en el sur, pero también existe la probabilidad de inundaciones.
“Para ambos escenarios no estamos preparados y eso es dramático, porque al final nuevamente sólo nos dedicaremos a atender a los damnificados”, refiere el dirigente agrario.
NO MÁS BONOS
¿Qué hacer para evitar un grave impacto de la recesión en el agro? Le preguntamos a Lozada. “Medidas urgentes que pasen por beneficios tributarios, importación sin aranceles, reducción del Impuesto a la Renta, pero no más bonos porque son perversos, miserables y no sabemos a quiénes llegan”, respondió.
Lo que se requiere, según Lozada, es un verdadero marco jurídico de promoción agraria:
Pagar el seguro social a los trabajadores del campo, pero con ventajas en el costo; que se les permita la compra de equipos nuevos para el riego con importación libre de aranceles y un tratamiento preferencial en el Impuesto a la Renta, que no paguen 30 si no 15%.
“Pero no vemos ninguna medida del gobierno hasta la fecha, siguen con el FertiAbono que no sabemos a quién llega y con un padrón observado por la Contraloría. Ese padrón se hizo a espaldas de los agricultores, no se consultó a las juntas de regantes que tienen la radiografía completa del sector agrario a nivel nacional, pero hicieron un nuevo padrón con vicios y erróneo”, dijo.
EN LA REGIÓN
En relación a lo que el gobierno regional puede hacer a favor del agro en Arequipa, Lozada manifestó que al momento no hay ninguna obra de envergadura para su sector.
“Se proyectó la construcción de una represa en el valle de Siguas, pero lamentablemente no se avanza nada, ni el perfil del proyecto, ni sabe dónde debería estar la represa en esa cuenca del río Colca”, destacó.
Mientras, en la cuenca del Chili, el canal Pañe – Sumbay en el sistema de represas es tan antiguo que se pierden 30 millones de metros cúbicos de agua al año.
“Es una coladera ese canal, tiene más de 80 años y no podemos darle mantenimiento serio, se pierde casi la mitad de lo que almacena una represa en las filtraciones”, dijo.
En plena crisis del agua dulce por el cambio climático, cuestiona Lozada, nos damos el lujo de desperdiciar tal cantidad de agua cuando es necesaria y vital para el agro.