“Tenemos que mendigar para solventar gastos”: Andia
“Los atletas peruanos tenemos que mendigar para solventar los gastos que demanda nuestra preparación”, así de directa y de clara fue, Mary Luz Andia Arotaipe, destacada deportista en marcha, clasificada para los Juegos Olímpicos de París 2024.
A pesar de las dificultades y falta de apoyo del Instituto Peruano del Deporte (IPD) y empresas privadas, Mary Luz Andia, en diálogo con el diario El Pueblo, mostró una amplia sonrisa, optimismo y mucho coraje para seguir practicando el atletismo que tanto la apasiona.
La atleta cusqueña de alto nivel, que ayer cumplió 23 años, manifestó su malestar, porque la disciplina que practica no tiene el apoyo como el fútbol.
“Tenemos que recurrir a la prensa, para mendigar, esa es nuestra triste realidad”, expresó.
En la actualidad Mary Luz Andia no realiza su preparación al 100 por ciento, porque como deportista de alto nivel y que hizo la marca para los Juegos Olímpicos de París 2024, el IPD no está cumpliendo con el apoyo económico desde hace tres meses para realizar sus prácticas.
“Nosotros para cumplir nuestro entrenamiento de alto nivel, necesitamos mínimo 3 mil soles mensuales, para la compra de vitaminas, zapatillas, indumentaria, movilidad para prepararnos en la costa, necesitamos ayuda de una nutricionista, fisioterapeuta, psicólogo, entre otros gastos”, expresó.
“Sin embargo, yo amo lo que hago, estoy metida hasta el cuello, será muy difícil que me retire, algún día cuando tenga resultados exitosos las empresas me apoyarán”, afirmó.
OLIMPIADAS DE PARÍS
“Yo no quiero ir, simplemente a participar (Juegos Olímpicos de París 2024), yo quiero estar en el top, 10, top 5 del mundo, porque estoy preparada, estoy entrenamiento, y tengo un buen entrenador”, señaló Mary Luz Andia.
Agregó: “Tengo 23 años, nos queda mucho tiempo para lograr una medalla olímpica, es mi objetivo más grande, para ello debo prepararme mucho”.
EL DATO
La marcha atlética es una disciplina del atletismo en la que se intenta caminar lo más rápido posible sin llegar a correr. El límite entre la marcha y la carrera se establece en el momento en que el atleta pierde contacto con el suelo de manera visible.