Usan la naturaleza para teñir sus tejidos

Por: Danna Felipe B.

En la localidad Sol de Sacsayhuaman del distrito de Chivay se ubica el centro artesanal Mallqui Pallay. Este recinto alberga 15 socios, creadores de impresionantes obras textiles.

Entre las confecciones se encuentran frazadas, chales y llaveros a base de fibra de alpaca o lana de oveja. Artículos que destacan por su calidad, subrayó el presidente de la asociación Mallqui Pallay, Antonio Condori.

Para obtener los colores de los tejidos, los artesanos se apoyan en la naturaleza. Usan cochinilla, cáscara de cebolla, maíz morado, malva, betarraga, barba de la piedra, repollo morado, entre otros productos. A todos le agregan limón y sal de piedra para la durabilidad de las tonalidades.

En ese sentido, Doña Tomasa Huaracha explicó que para obtener un kilo de lana o fibra teñida se necesita tres kilos de los productos mencionados, aunque de algunos solo se requiere un poco debido a su fuerte pigmentación.

La mujer artesana teje desde los 8 años. Actualmente, tiene 61 y con ayuda de su “wichuña” (hueso de alpaca que termina en punta, con la cual se separan los hilos y se forman los diseños) y «pampa aguay» (telar de estacas, donde se colocan los hilos) es capaz de crear sorprendentes trabajos textiles. Por ejemplo, una frazada que le demanda treinta días de trabajo; no obstante, el resultado nunca decepciona.

Asimismo, los artesanos confeccionan trajes de Wititi, danza declarada Patrimonio Cultural Inmaterial de la Humanidad por la Unesco. También ofertan medias, gorros, vinchas, muñequitos y demás artículos. Todos plazman una parte de la cultura del distrito cayllomino.