Además del esfuerzo ruso, el Reino Unido, con BioNTech, y las farmacéuticas Moderna y Merck buscan tratamientos y vacunas contra el cáncer.

En un reciente Foro Tecnologías del Futuro en Moscú, el presidente ruso, Vladímir Putin, hizo un anuncio revelador: científicos rusos están «a un paso» de desarrollar vacunas contra el cáncer, un proyecto que forma parte de la lucha estatal iniciada en 2019. Putin detalló que están cerca de crear «oncovacunas» y una nueva generación de medicamentos inmunomoduladores durante una intervención que despertó la atención mundial.

“Estamos cerca de crear las llamadas «oncovacunas», vacunas contra el cáncer y una nueva generación de fármacos inmunomoduladores, y espero que pronto se utilicen eficazmente”. Vladimir Putin, presidente de Rusia

El líder ruso no especificó los tipos de cáncer que abordarían estas vacunas, pero subrayó su confianza en que se utilicen eficazmente como métodos de terapia individual. Este anuncio plantea la pregunta de si Rusia será pionera en esta innovación o si otros países y empresas están también cerca de lograr avances similares.

Carrera a contrarreloj

La competencia en la búsqueda de vacunas contra el cáncer está en pleno auge a nivel internacional. Mientras Rusia destaca sus avances, es crucial reconocer que otros países también están inmersos en este esfuerzo.

En 2023, el Reino Unido firmó un acuerdo con la empresa alemana BioNTech, comprometiéndose a realizar ensayos clínicos para el «tratamiento personalizado del cáncer» con el objetivo de beneficiar a más de 10,000 personas afectadas para el año 2030.

Al mismo tiempo, las compañías estadounidenses Moderna y Merck & Co están avanzando con una vacuna experimental que, según estudios en etapa intermedia, podría reducir significativamente las probabilidades de recurrencia o muerte por melanoma, el tipo de cáncer de piel más letal.