— Redacción Diario El Pueblo —

Marilú Gonzales Porras, alcaldesa del distrito de Ocoña, quien hace algunos días protagonizó un incidente junto con la presidenta del Congreso, María del Carmen Alva, además de indicar que se sentía, discriminada, atropellada y maltratada, dijo que no se volvería a reunir con ella, debido a su actitud prepotente.

Además quedó con la impresión de que quiere buscar una especie de venganza por haber generado la discusión. “Sí hablé enfáticamente ese día, pero no le falté el respeto a nadie, lo único que pretendía es que no se vulneren los derechos de los alcaldes”, añadió.

Contó que en horas de la noche, recibió la llamada de la asesora de María del Carmen Alva, quien le pidió disculpas a nombre de la titular del Parlamento y le recomendó que no hiciera declaraciones a los medios de comunicación, aunque no en tono de amenaza, sino de buenas maneras.

La verdad me hubiera gustado que fuera ella misma la que ofreciera sus disculpas, pero dijo que lo deja a su voluntad, dijo la alcaldesa, quien ante la probabilidad de que algunos proyectos se queden sin financiamiento también levantó la voz para llamar la atención de los parlamentarios presentes, lo que originó la llamada de atención de Alva, en tono bastante chocante.

“Me trató como si fuera su empleada, en mi lugar otra persona le hubiera contestado que no era su casa en donde estábamos sino de todos los peruanos y al igual que ella ostenta un cargo elegida por la población, a mí también me eligieron “, añadió.

El proyecto de ley al que se refirió la autoridad edil es impulsado por la Comisión de Constitución que preside Patricia Juárez, el cual pretende limitar al Ejecutivo para dar decretos de urgencia y declarar inconstitucionales los decretos 086-2021 y 100-2021, en los cuales hay 336 proyectos de obras que se quedarían sin financiamiento.

La alcaldesa indicó que aun no ha definido si continuará en la vida política y a qué cargo postularía más adelante, ya que es militante activa de Arequipa, Tradición y Futuro.