— Redacción Diario El Pueblo —

Por: Roxana Ortiz A.

En unos seis meses más, será la población la que tenga que elegir, entre consumir leche evaporada preparada con leche fresca obtenida de los productores peruanos o consumir mezclas lácteas, aseguró el presidente de la Sociedad Agraria de Arequipa (SADA), Daniel Lozada Herrera, luego que se aprobara la modificatoria del Reglamento de la Leche y Productos Lácteos.

Indicó que en el empaque, la lata o la bolsa, se especificará claramente, qué tipo de productos es el que se está consumiendo. Los productores ganaderos del país se dedicarán en los siguientes meses a informar a la población la diferencia que hay entre los dos productos.

“Las amas de casa tendrán posibilidad de una libre elección y con conocimiento de lo que darán como alimento a sus hijos, si quieren un productos que es elaborado en base a leche en polvo con otros aditamentos que no son nada saludables o la leche evaporada que está hecha con leche fresca y por parte de los ganaderos del país, que durante tanto tiempo han tiempo solo les quedó sobrevivir”, añadió.

Jorge Reyes, vicepresidente de Sada, aclaró que con el reglamento no se prohíbe la importación de la leche en polvo, porque forma parte del Tratado de Libre Comercio, y las empresas que la utilizan seguirán elaborando sus productos como antes; pero los consumidores locales ya sabrán cuál elegir.

Esta medida aprobada por el gobierno con el tiempo beneficiará a los ganaderos, puesto que cada vez se comprará menos mezclas lácteas y de esta manera se obligará a las empresas a adquirir más leche fresca y con ello, mejorar el precio que les pagan, de 1,40 en el mejor de los casos, porque otros productores de las zonas altas apenas reciben 80 céntimos.

Consideran los ganaderos que el precio de la leche se debe pagar como se maneja internacionalmente, en Estados Unidos, Nueva Zelanda o en Europa, que es 2 soles, aunque los productores locales estarían satisfechos a que se les pague 1.80 soles por cada litro.

“Arequipa en su momento fue una gran cuenca lechera, la primera en el país, pero poco a poco los ganaderos se vieron en la obligación de vender sus animales o sacrificarlos ante la imposibilidad de seguir manteniéndolos, por el bajo precio que se percibe de la leche, que prácticamente es un monopolio en el país. Si se mejoran los precios, es probable que nuevamente los productores vuelvan a apostar por la producción láctea”, añadió.