Por: Dany La Torre

El aumento del precio de los combustibles retornó a los tableros de distintas estaciones de servicios y grifos en Arequipa. Algunos de los más afectados son los taxistas, quienes consideraron que la nueva suba, responde a una presunta especulación por parte de empresas multinacionales distribuidoras del combustible. El dirigente de la Federación Regional de Taxistas de Arequipa, Alexander Cornejo, señaló que entidades como Osinergmin e Indecopi, no vienen cumpliendo cabalmente con su labor.

Como se sabe, desde el viernes 29 de abril entró en vigencia la norma establecida por el Organismo Supervisor de la Inversión en Energía y Minería (Osinergmin) que fija las bandas de precios para los combustibles GLP, gasolina de 84 y 90 que se encuentran en el Fondo de Estabilización de los Precios de los Combustibles (FEPC). Sin embargo, en los últimos días se registró una nueva suba de S/.1.25 para diésel y S/.0.35 en gasoholes de 90, 95 y 97 octanos.

Ante ello, el representante de los taxistas consideró que los grupos multinacionales distribuidores del combustible en el país estarían concertando y hasta especulando con los precios de los derivados del crudo. “Ya esto es inconcebible, el presidente ya dio medidas que no se perciben (…) parece que aquí los grupos de poder como esas grandes empresas, vienen haciendo lo que les da la gana”, dijo.

En otro momento, refirió que entidades como Osinergmin e Indecopi, no vienen cumpliendo con su labor, sino que, por el contrario, mantienen una actitud “pasiva” ante la crisis. “Ya tuvimos reuniones con el congresista Jaime Quito que nos dijo que hablaría con (el premier) Aníbal Torres y que este emitió un documento a Indecopi para que haga su trabajo (…) (sin embargo), no lo hacen, Osinergmin tampoco está trabajando, son las instituciones que deberían defender al pueblo, pero no defienden a nadie”, agregó.

En tanto, el vocero de la Asociación de Grifos de Arequipa, Magno Salas Montiel, refirió que la suba del crudo es debido a la crisis internacional. Indicó que la banda de precios que impulsó el Gobierno, tiene como finalidad atenuar una suba excesiva del combustible, pero que no podrá asegurar nuevos incrementos.

“El efecto que tiene es que el incremento del precio, muy duro para la economía, sea paulatino. Definitivamente están prohibidas las subvenciones y el combustible no puede estar subvencionado, el FEPC está haciendo su efecto, pero no puede mantenerse a precios por debajo de lo que está realmente en el mercado (…) incluso, si sigue subiendo, debería de exonerarse el IGV momentáneamente”, agregó.