Ante los festejos por el aniversario 483° de Fundación Española de nuestra ciudad, el arzobispo Javier del Río Alba invitó a la población arequipeña a celebrar por nuestra región, pero hacerlo sin caer en excesos ni libertinajes. Más aún, durante los días centrales de aniversario –14 y 15 de agosto– donde algunos ciudadanos usan como excusa la celebración para embriagarse y perturbar la paz urbana.

«Es bonito celebrar. Lo hacemos como expresión de alegría y agradecimiento al formar parte de Arequipa, pero se debe procurar mantener siempre el orden y evitar los excesos. Para que así estas celebraciones nos unan más y ayuden a trabajar por el bien común», sostuvo el arzobispo de Arequipa, Javier del Río Alba.

Como se recuerda, la serie de conciertos que tienen lugar por el aniversario de Arequipa –principalmente en el Campo Ferial Cerro Juli– dejan indirectamente algunos perjuicios para Arequipa, como decenas de ebrios que perturban el orden urbano, ciudadanos hospitalizados en coma etílico e, incluso, accidentes automovilísticos protagonizados por chóferes imprudentes.

Además de ello, para el monseñor esta época debe ser también un tiempo de agradecimiento hacia aquellas autoridades y servidores públicos que trabajan por el bien de la comunidad, pero también debe ser época de reflexión para que quienes no actúen bien replanteen su rumbo.