Por: Karely Linares H.

Los fervientes devotos del distrito de Chivay, Huanca e Ichupampa celebran a lo grande al santo patrono.

Fieles devotos y miembros de la Hermandad del Señor de Huanca, pertenecientes a la parroquia Nuestra Señora de la Merced-Arequipa, se unieron en una emotiva celebración litúrgica y una imponente procesión en la Plaza de Armas el día de hoy, 14 de septiembre, en honor al Señor de Huanca. Como de costumbre se realizará una misa de octava este jueves 21 de septiembre a las 11:00 a.m. en la parroquia mencionada.

El mes de septiembre tiene un significado especial para los Mercedarios del Convento de la Merced Arequipa y la Hermandad del Señor del Huanca, ya que marca el período en el que se llevan a cabo dos importantes eventos religiosos: la Solemnidad de Santa María de la Merced y la Solemnidad del Señor de Huanca. Estos eventos de profunda espiritualidad fortalecen el vínculo con su santo patrón y se celebran con gran devoción.

El Señor de Huanca es una de las imágenes más veneradas en la región vecina Cusco, es por ello que Arequipa y otras regiones han empezado a rendirle culto. En 2014, fue declarado Patrimonio Cultural de la Nación, lo que atrajo a miles de ciudadanos, tanto nacionales como extranjeros, al Santuario de Huanca ubicado en el poblado cusqueño de San Salvador para pedir milagros que supuestamente concede la imagen.

En los distritos de Ichupampa, Huanca y Chivay de la provincia de Caylloma, se congrega una gran cantidad de devotos del Señor de Huanca, quienes participan en diversas actividades en la víspera de la fiesta. En Chivay, los habitantes celebran con comparsas, músicos, bailarines y espectaculares fuegos artificiales, como castillos, en la Plaza de Armas. Mientras que en Huanca, en las Vísperas de la fiesta, se lleva a cabo un recorrido por las 14 estaciones en el anexo de Tanccaya, en el distrito de Huanca, además de la entrada de capo, la quema de castillos y el consumo de bebidas tradicionales como el «calientito». De manera similar, en Ichupampa, los alferados, mayordomos y bandas acompañan a los danzarines en una devota peregrinación por la Plaza Principal.