El 70% de los pacientes diagnosticados siguen un tratamiento farmacéutico.

Por: Karely Linares H.

La incidencia de enfermedades mentales en Arequipa ha aumentado desde el inicio de la pandemia. A pesar de que la depresión y la ansiedad son las afecciones mentales más comunes, trastornos como las fobias, los trastornos obsesivos compulsivos y el trastorno de estrés postraumático han experimentado un aumento en los últimos años debido al confinamiento y las restricciones relacionadas con la Covid-19, según informó el Dr. Breison Velarde Torres, director del centro de salud mental Moisés Heresi.

Las personas diagnosticadas con estas patologías suelen haber experimentado pérdidas de seres queridos, dificultades económicas y aislamiento, lo cual ha llevado a una falta de control sobre sus emociones. Además, el personal de salud que ha estado en contacto con pacientes que fallecieron con frecuencia también ha sido diagnosticado con enfermedades mentales.

Todas estas afecciones tienen tratamiento y pueden ser abordadas por profesionales de la salud mental, como psicólogos que ofrecen terapia y psiquiatras que pueden proporcionar un enfoque farmacológico cuando es necesario. Estas afecciones mentales no hacen distinciones entre grupos etarios, ya que ahora incluso los niños son diagnosticados con diversos problemas mentales.

En el caso de la depresión y la ansiedad, que son enfermedades prevalentes, han experimentado un aumento del 40% en la región de Arequipa, en comparación con las tasas del 5 al 15% anteriores a la pandemia. El Dr. Velarde Torres, director del centro de salud, señaló que estas patologías mentales se han duplicado en Arequipa, y lamentablemente, solo el 70% de estas personas sigue un tratamiento farmacológico.

En conmemoración del Día Mundial de la Salud Mental, el centro Moisés Heresi llevó a cabo una campaña gratuita desde las 9 a.m. hasta la 1 p.m. Durante esta iniciativa, los pacientes fueron sometidos a pruebas de tamizaje para detectar posibles patologías y, a partir de los resultados, fueron derivados al área de psicología y psiquiatría. La campaña contó con la participación de 4 psiquiatras, 1 médico de familia y psicólogos especializados.