Por: Carlos Meneses

El que las actividades del Apec se hagan en Arequipa es una oportunidad singular para la ciudad y una garantía de éxito para el gobierno y pueblo del Perú.

El día de hoy se inicia, en Arequipa, una cita de APEC dedicada a las relaciones comerciales de los países integrantes. Paralelamente se tratarán temas vinculados a la mujer en el organismo social y económico que dirige la presidenta peruana, superado que fue el impase provocado por el presidente mexicano, Manuel López Obrador, quien no quiso entregar en la oportunidad debida la dirección del Apec y obligó a una transición lograda por el presidente chileno que terminó cuando Gabriel Boric confió los destinos institucionales a quien correspondía, que era el gobierno del Perú.

Para la reunión de Arequipa han llegado delegaciones representativas de todas las naciones miembro y también la Policía Nacional ha adoptado medidas para garantizar la seguridad de los participantes que son bienvenidos y que tendrán por sede de sus actividades el Centro Ferial de Cerro Juli.

En realidad se trata del inicio de actividades que tendrán su acto culminante este mes de noviembre cuando se inaugure del puerto de Chancay que abrirá una nueva ruta de importaciones y exportaciones entre Asia y el Pacífico sur. Por eso es que para Arequipa es un compromiso muy importante porque los temas que se tratarán tienen vinculación con el desarrollo y sobre todo con el deferente trato con que debe distinguirse la participación de la mujer en el comercio internacional.

No tenemos la menor duda de que los resultados que se apetecen serán alcanzados y que el nombre de Arequipa será bien recordado por todos los participantes que tendrán oportunidad de conocer las bondades de una región en proceso de desarrollo.