Lluvias incrementan caudal de los ríos en Arequipa

ADVIERTEN RIESGO DE DESBORDES

Las recientes lluvias registradas en Arequipa ocasionaron un drástico incremento en el caudal de diversos ríos de la región. Los niveles de agua en los ríos Majes, Ocoña y Camaná se duplicaron respecto a los valores registrados a inicios de 2025. No obstante, se mantienen por debajo de los niveles de alerta amarilla establecidos por el Servicio Nacional de Meteorología e Hidrología (Senamhi).

De acuerdo al hidrograma de la estación Huatiapa, el caudal del río Majes pasó de un promedio de 50 metros cúbicos por segundo (m³/s) a inicios del año, a 120.82 m³/s registrados el sábado 25 de enero. Su pico más alto ocurrió el 24 de enero, alcanzando los 177.04 m³/s. Aunque este aumento generó preocupación entre los residentes, todavía está lejos de los 250 m³/s requeridos para declarar alerta amarilla y los 400 m³/s de la alerta roja.

En el caso del río Ocoña, la estación Ocoña reportó un incremento de 52 m³/s registrados a inicios de enero a 153.26 m³/s el 25 de enero. Aunque casi triplicó su caudal, el nivel sigue distante de los 450 m³/s correspondientes a la alerta amarilla y los 950 m³/s de la alerta roja. Por su parte, el hidrograma del río Camaná, monitoreado por la estación Hacienda Pampata, muestra que este torrente permanece está por debajo de los niveles de alerta establecidos desde Senamhi.

En cuanto al río Tambo, la estación La Pascana registró un caudal de 146.63 m³/s, con un pico máximo de 180.04 m³/s el viernes 24 de enero, cercano a los 230 m³/s de la alerta amarilla. En contraste, el río Chili, monitoreado desde la estación Puente el Diablo, presenta un caudal de apenas 9.60 m³/s, lejos de los 60 m³/s necesarios para una alerta amarilla.

Pese a los valores actuales, el Senamhi advirtió que incrementos repentinos podrían generar riesgos de desbordes en las partes medias y bajas de los valles. En estos escenarios, los campos de cultivo podrían convertirse en zonas de afectación. Por ello, las autoridades recomendaron a la población y a las instituciones competentes tomar las precauciones necesarias para prevenir percances.

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