En 2025 Perú podría exportar 40% más de oro ilegal que el 2024

SEGÚN IPE:
En 2025, el Perú podría exportar 40% más toneladas de oro ilegal de lo registrado en 2024, proyectó el gerente general del Instituto Peruano de Economía (IPE), Carlos Gallardo.
Según el último estudio del IPE de noviembre pasado, en 2024, el Perú habría exportado cerca de 92 toneladas de oro ilegal, casi 20% más que lo proyectado para el 2023 (77 toneladas).
Estos envíos al exterior de oro ilícito ascendieron a US$ 7,000 millones, que representa un 46% más respecto a lo registrado en 2023 (por mayores precios internacionales).
PRECIO AL ALZA
Gallardo señaló que el mercado internacional espera una tendencia al alza del valor del mineral, “con un precio constante” y agregó que, ante ello, se proyecta que la producción ilegal haga lo propio.
“Este año (2024) es un 20% en cuanto a cantidad con un precio de oro constante esperemos ver ese mismo aumento en cuanto a la extracción del mineral. Luego el valor puede acercarse al 40% si es que vemos un aumento en el precio del oro como el que hemos visto este año 2024”, apuntó en conversación con el Instituto de Ingenieros de Minas del Perú.
Según estos cálculos la exportación de oro ilegal en el Perú alcanzaría unas 129 toneladas, 40% más de las 92 toneladas del 2024. En el 2023 la cifra ascendió a 77 toneladas (US$4,833 millones), según el IPE.
ZONAS PRODUCTORAS
Junto con Pataz (La Libertad), Madre de Dios se mantiene como uno de los principales centros de producción de oro ilegal. Así, según datos de Osinergmin, en los últimos cinco años su consumo de combustibles (insumo clave para la actividad minera en zonas de selva) se incrementó en 40%, más de 10 veces el promedio nacional (3.8%).
Este resultado viene impulsado por el mayor precio del oro, que creció casi 70% en ese período y se ubica en niveles históricos cercanos a US$2,500 por onza. Lo que es grave, ese consumo de combustible en la Amazonía está exento del pago de IGV e ISC, una exoneración que ha costado al Estado más de S/8 mil millones desde el 2008, en términos reales.
Adicionalmente, dentro de esta región, la actividad minera se concentra en el sur de la provincia del Manu.
Los estragos de la minería ilegal abarcan varias dimensiones. Entre el 2015 y el 2021, el porcentaje de la población de 15 años a más, víctimas de delitos con armas de fuego en Madre de Dios, se multiplicó por cinco, de 7.5% a 38.6%, casi cuatro veces el promedio en el resto del Perú (10.9%). Además, entre el 2021 y el 2024, la deforestación por minería ilegal alcanzó casi 31 mil hectáreas, según estimados del Proyecto de Monitoreo del Amazonas Andino (MAAP), según cifras del IPE.

Carlos Gallardo, gerente general del IPE, señaló que, así como el mercado espera una tendencia al alza del valor del mineral, se espera que la producción ilegal también se eleve.
ESTRATEGIA
Un reciente estudio del IPE propone una estrategia integral de combate a la minería ilegal, como la necesidad de acciones de interdicción e inteligencia permanentes complementadas con alternativas de desarrollo económico, lo cual requiere mayores recursos fiscales. Sin embargo, entre el 2019 y el 2024, el presupuesto público asignado al programa Reducción de Minería Ilegal disminuyó en 37%, en términos reales, y representa 0.5% del presupuesto destinado a orden público y seguridad.
El estudio además muestra que en el Perú, existen 18 distritos y provincias con mayor riesgo por la minería ilegal. Estos son: Condorcanqui, Ayabaca y San Ignacio en la Amazonía, además de las provincias fronterizas ubicadas en Loreto, así como Atalaya, Puerto Inca y Oxapampa (Selva Central), Nazca, Palpa, Camaná y Caravelí (Sur medio), Madre de Dios, Puno; Pataz, Sánchez Carrión, Otuzco, Santiago de Chuco, Cajabamba y San Marcos (Cinturón minero del Norte).