«Si tu paciente no va a ser lo más importante, ya no jures»

Por: Danna Felipe B.
Advierten que muchos profesionales han deshumanizado su labor de servir. Profesionales juramentan ante Hipócrates velar por la vida de las personas, sobre todo.
MÉDICOS DEBEN COMPROMETERSE
Vocación. Antes de alcanzar su colegiatura y poder ejercer su ardua profesión, el médico jura ante Hipócrates que consagrará su vida al servicio de la humanidad. Que trabajarán incansablemente por la salud y bienestar de sus pacientes sin ver un fin económico. Pero para muchos malos profesionales esto solo queda en palabras. Muchos han deshumanizado su labor de servir. El dinero es su prioridad. Entonces ¿para qué juran? Ya no deben hacerlo.
Luis Vela, médico, docente universitario y tutor de internado médico en el centenario hospital Goyeneche, recordó a estudiantes y profesionales de Medicina que «nada es permanente a excepción del cambio». El juramento ha evolucionado, hoy en día lo más importante es el paciente.
«Lo que pasa es que antes no cualquiera podía enseñar Medicina y no cualquiera podía aprender. Era como un círculo elitista. Entonces, en el juramento mucho se habla del respeto al maestro». Por ende, cree firmemente que al momento de juramentar hay que recordar esa evolución, la misma que puede resumirse en la bioética.

CUATRO PRINCIPIOS
«Cuatro grandes principios. Primero, beneficencia, ser de beneficio. Su espejo contrario está en el segundo, la no maleficencia. Tratar de nunca obrar en contra del paciente, voluntaria o involuntariamente. Tercero, autonomía. Antes la Medicina era paternalista. Ahora el paciente tiene capacidad de decisión. No puede ser obligado a someterse a ningún procedimiento médico. Por último, justicia. En una sociedad donde los recursos de salud son escasos, se debe hacer la mejor distribución», sostiene.
Vela Gómez indicó que la ética profesional se aprende más en la práctica. Los docentes universitarios, como él, pueden tomarse incluso todo un semestre explicándote por qué es importante ejercer tu profesión en base a un conjunto de normas y valores. Puedes obtener maravillosas calificaciones en el curso. Sin embargo, valgan verdades, los conocimientos que no se ponen en práctica son fáciles de olvidar. Para eso, también los médicos que conviven con los nuevos salvadores deben ser ejemplo de lo que se predica en las casas de estudios superiores.
Hoy en día, los pacientes presentan cuadros médicos más complejos. Escapar de una decisión arriesgada es difícil. Las brechas en la salud son las principales enemigas de los galenos. Es verdad, a veces, lamentablemente, los insuficientes recursos son destinados a quien tiene más probabilidades de seguir viviendo. Son decisiones que a nadie le gustaría tomar y muchas veces llegan sin previo aviso.
«La ética se practica todos los días. En nuestro caso, siempre pensando en lo mejor para el paciente. A los internos les digo: ‘Bien, ahora vamos a hablar de ética’. Está implícito. Deben entender que, todos los días durante su ejercicio profesional y por vocación, van a tomar decisiones médicas».
Está de más mencionar que, aparte de las normas y valores en los que cada profesión se rige, hay otro conjunto que nos dirigen como humanos.
Augusto Kamimoto, médico, docente universitario y miembro de la Junta Directiva del Consejo Regional V del CMP (Arequipa), dijo que están trabajando para que el juramento deje de ser visto como un simple requisito ante los futuros colegiados. Que su «Sí, juro» no sea en vano. Para obtener el título profesional debes superar el internado. En esa etapa recibes una muestra de lo que será tu realidad durante los años de ejercicio médico. Está en cada uno hacer lo correcto y asumirlo con suma responsabilidad.
«El futuro colegiado debe conocer el conjunto de normas y valores que rige nuestra profesión. Sobre todo, tener presente que lo más importante es el paciente. De no ser así, mejor que no preste juramento».
Una de las ideas del Consejo Regional V para promover la ética en el trabajo es lograr que, antes de que los venideros galenos obtengan su título profesional y busquen ejercer, lleven un curso especial de ética. «Será como un filtro para nosotros».

Kamimoto Rodríguez tampoco pasó por alto que la pandemia de la COVID-19 fue un duro golpe para la formación en Medicina. «Nosotros tenemos bastantes problemas por las clases virtuales. Ha habido una gran afectación respecto al desenvolvimiento en la práctica. Ha traído mucho retraso», lamentó. Aparte si fue difícil impartir conocimientos técnicos, imagínese con aquellos que se acostumbra a pasar por alto o piensan ya saber.