El aeropuerto de Lima debe ser el despegue de una gran campaña de promoción turística nacional destinada a tener millones de visitantes en los próximos años.

Por: Carlos Meneses

Está fijada para el primer día de junio a las 12 horas el inicio de labores del nuevo aeropuerto de Lima que será útil para movilizar a 20 millones de pasajeros que salgan o entren al territorio nacional.

Debemos estar virtualmente seguros de que esta vez no habrá ninguna postergación y para ello se iniciará una marcha blanca en los 15 días previos en que se harán todas las pruebas para garantizar bondades del terminal aéreo. Sería también oportuno y necesario que otros aeropuertos peruanos tengan si no la misma dimensión y calidad de servicio algo similar para que en caso de una supuesta imperfección que pudiera presentarse en otros terminales de la región central del país podrían asumir la responsabilidad de sustituir al de Lima.

En todo caso, reclamamos, quienes vivimos en regiones ajenas a Lima, bondades manifiestas para que el servicio aéreo sea total y beneficioso para propios y extraños, sobre todo para provocar un mayor turismo sobre nuestra capital y las poblaciones aledañas.

El acondicionamiento de servicios de las pistas en función, así como la disponibilidad de iluminación adecuada son requisitos que el público pedirá para poder tener un buen servicio aéreo nacional que deben complementar las compañías privadas de aviación y también los servicios públicos de atención.  

El aeropuerto de Lima es considerado el mejor que habrá en América de Sur y dados los esfuerzos realizados estamos seguros que ese será el resultado final de un empeño en el que hemos estado trabajando todos los peruanos.