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TERMINAREMOS EL AÑO CON 21 MIL VEHÍCULOS NUEVOS
Se dispara venta de autos nuevos
en Arequipa en primeros 4 meses

Presidente de la CCIA y gerente general de Perumotor, Carlos Fernández.

Arequipa necesita mejorar infraestructura vial para el incremento del parque automotor.
El presidente de la CCIA, Carlos Fernández, destaca la mejora en la economía, pero muestra su preocupación por el caos vehicular que se viene si las autoridades no trabajan en mejorar las vías de comunicación.
Por Jorge Turpo R.
En Arequipa, el rugido de los motores nuevos se ha vuelto más frecuente. Después de varios años de desaceleración y pandemia, la industria automotriz vive un renacer. Sólo en los primeros cuatro meses de 2025, la venta de vehículos nuevos en la región ha crecido, en promedio, un 20 % con respecto al mismo período del año pasado.
El dato no solo entusiasma a los concesionarios: también revela una ciudad que, pese a sus cuellos de botella viales, se mueve —o al menos quiere moverse— más y mejor.
Carlos Fernández, presidente de la Cámara de Comercio e Industria de Arequipa (CCIA) y gerente general de Perumotor, no duda en calificar este inicio de año como “excepcional”.
A su juicio, el mercado automotriz está dejando atrás la inercia de la recesión y la pandemia, y asoma con fuerza en sectores donde la demanda parecía dormida.
“Estamos ante un panorama alentador”, afirma. “El mercado de vehículos ligeros ha crecido en 15 %, se han vendido 6 mil 239 unidades en cuatro meses”, destacó.
Mientras que a la venta de vehículos pesados (camiones ligeros y minibuses) le ha ido mejor. Su incremento en cuatro meses es del orden del 27 % en relación al año pasado. “Se han vendido 7 mil vehículos pesados en este inicio de año”, apunta Fernández.
Si lo proyectamos a fines del año, Arequipa contará en sus calles y avenidas con 21 mil unidades nuevas y aproximadamente otras 20 mil unidades usadas.
“El mercado automotriz se va a incrementar en 40 mil autos en este año”, dice Fernández.
Agrega que los vehículos chinos ya ocupan el 30 % del mercado automotriz.
¿A QUÉ SE DEBE EL REPUNTE?
La respuesta está en varios factores que convergen. El primero: la renovación de flotas empresariales que se postergó por años. “Muchas empresas, desde constructoras hasta distribuidoras, están invirtiendo nuevamente en movilidad propia. Necesitan eficiencia y seguridad”, explica Fernández.
El segundo: la confianza del consumidor. “Aunque el contexto nacional sigue siendo incierto, en Arequipa hay una sensación de recuperación económica, al menos parcial. Eso se refleja en las decisiones de compra”, agrega.
A esto se suma el regreso de la oferta crediticia con tasas más accesibles, y las agresivas campañas promocionales de las concesionarias, que ofrecen bonos, descuentos y facilidades que no se veían desde 2018.
No es casual que las SUV y los vehículos familiares encabecen las listas. “Las SUV compactas son las estrellas del mercado. Tienen buen rendimiento, diseño atractivo y espacio, sin que el precio se dispare”, agrega.
Según datos de la Asociación Automotriz del Perú (AAP), Arequipa ya representa cerca del 10 % del total de ventas de autos nuevos a nivel nacional. Una cifra que confirma la importancia de la región como segundo mercado del país, después de Lima.
UNA CIUDAD QUE NO AVANZA COMO SUS AUTOS
Pero no todo marcha sobre ruedas. El crecimiento acelerado de las ventas de autos nuevos choca, literalmente, con un problema de vieja data: la falta de infraestructura vial adecuada.
Carlos Fernández es tajante: “¿De qué sirve vender más autos si seguimos con las mismas vías de hace veinte años? Si queremos un crecimiento ordenado, tenemos que invertir seriamente en carreteras, accesos y proyectos truncos que duermen en los escritorios de los gobiernos locales y regionales”.
Uno de los casos más simbólicos es la prolongación de la avenida La Marina, que permitiría descongestionar una de las zonas más transitadas del centro de Arequipa y dar salida más fluida a los distritos de Yanahuara, Cayma y Cerro Colorado.
“Esa obra está paralizada desde hace años. Tiene un puente inconcluso. Y mientras tanto, seguimos colapsando en horas punta”, denuncia Fernández.
Otro punto crítico es la conexión de Arequipa con las zonas industriales del Cono Norte y con el aeropuerto. “Tenemos empresarios que pierden tiempo y dinero por no poder transportar carga eficientemente. Si queremos que Arequipa sea realmente competitiva, tenemos que pensar en infraestructura vial como un asunto prioritario, no secundario”.
UN RETO PARA TODOS
El boom de ventas de autos nuevos es, en el fondo, una paradoja: mientras más se moviliza la economía y más autos circulan, más evidente se hace el rezago en la planificación urbana.
Fernández hace un llamado conjunto al Gobierno Regional, a las municipalidades distritales y a la sociedad en su conjunto: “Este es un momento para mirar con ambición. No podemos seguir con una ciudad pensada para medio millón de habitantes, cuando ya somos más de un millón. No basta con vender autos, hay que construir una ciudad que los soporte”.
En esa línea, propone la creación de una mesa técnica entre el sector privado, las universidades y los tomadores de decisiones públicas para delinear un plan integral de movilidad urbana.
“No se trata solo de ampliar pistas, sino de pensar en rutas inteligentes, infraestructura para transporte público y normativas que acompañen el crecimiento. Si no lo hacemos ahora, después será demasiado tarde”, anota.
RESALTAR
El pronóstico para los próximos meses es optimista. Según Fernández, de seguir la tendencia actual, Arequipa cerraría el 2025 con un crecimiento del 30 al 35 % en ventas de vehículos nuevos con respecto al año anterior. Eso implicaría volver a niveles prepandemia, e incluso superarlos.
“Tenemos marcas que están ampliando sus salas de exhibición y su stock, lo cual demuestra que hay confianza en el mercado local”, señala.
El mensaje es claro: Arequipa quiere moverse más y mejor. Pero para que el impulso del sector automotriz no termine en un embotellamiento crónico, hará falta algo más que buenos motores y ofertas atractivas. Hará falta visión. Y, sobre todo, decisión.
