Embellecen para un único día.

Redacción Diario El Pueblo

Parece que en la cabeza de muchas figuras políticas está sembrada la idea de sacar el máximo partido a la belleza de su distrito solo cuando tienen alguna actividad. Puede que en los contenidos visuales difundidos en redes sociales o medios de comunicación no se note, pero la gente de la zona sí que lo hace y hasta lo toma como una burla.

Repintan señalización horizontal de vías, sardineles y rompemuelles. No es casualidad que, incontables veces, el lugar de la actividad luzca de colores llamativos; hasta más esmero le meten a la limpieza. Las autoridades le prestan una detallada atención a cada rincón, más aún si tienen la visita de alguien importante. Cuidan que él o ella se lleve la mejor imagen posible, y está bien. No se les critica que presenten una casa limpia. Lo que es discordante es que, después de esa actividad, difícilmente vuelva a lucir así.

Eso pasa mucho en los aniversarios de los pueblos en la ciudad, solo una parte está impecable, ni siquiera toda la calle o avenida. Es más, donde va el estrado es el punto que más cautela recibe.