Las motos, las preferidas de las grúas que no descansan

Motoclistas que infringan normas también serán intervenidos. Las grúas de la Municipalidad Provincial de Arequipa ((MPA) han comenzado a operar con mayor fuerza desde hace seis días, y su presencia ya se siente, entre los conductores de motocicletas. Estos vehículos de dos ruedas parecen haberse convertido en los principales blancos de los remolques, cuando se encuentran estacionados en zonas rígidas.
CADA DÍA INTERVIENEN 14 VEHÍCULOS MENORES
Según reportes extraoficiales, entre 10 a 14 vehículos son trasladados diariamente al depósito municipal. De este total, alrededor del 70% corresponde a motocicletas, mientras que el 30% restante incluye automóviles, camionetas y otros vehículos. La infracción por estacionar en zonas prohibidas está considerada como grave en el Reglamento Nacional de Tránsito.
En un reciente operativo conjunto entre la MPA y la Policía Nacional del Perú (PNP), se procedió al retiro de diversos vehículos mal estacionados en el Cercado de la ciudad. Las calles intervenidas incluyeron Ugarte, San José y otras zonas aledañas, donde el problema del mal estacionamiento es persistente.
Estos operativos tienen como objetivo principal fomentar una cultura de respeto a las normas viales. Las autoridades buscan generar conciencia entre los conductores sobre la importancia de no obstaculizar el tránsito ni poner en riesgo la seguridad de peatones y otros conductores.
Además del componente preventivo, las acciones también buscan mejorar la imagen urbana de la ciudad. Al tratarse de una urbe turística, Arequipa debe ofrecer un entorno ordenado tanto para los visitantes nacionales como extranjeros que la recorren diariamente.
Los propietarios de vehículos remolcados deben asumir los costos del servicio de grúa. Para los vehículos livianos, como motocicletas y automóviles, la tarifa es del 2.8% de una Unidad Impositiva Tributaria (UIT), lo que equivale a S/ 149.80. Para los vehículos pesados, el monto se eleva al 3%, es decir, S/ 160.50.
Estos costos, aunque pueden parecer elevados, son parte del sistema sancionador diseñado para disuadir a los infractores recurrentes. El mal estacionamiento, además de infringir normas, contribuye al caos vehicular, especialmente en el centro histórico de la ciudad.
El municipio ha advertido que los operativos continuarán de manera ininterrumpida en distintos puntos críticos de la ciudad. No se descarta ampliar la cobertura hacia otros distritos, en función de las necesidades detectadas por los inspectores de transporte.
Finalmente, las autoridades han reiterado su llamado a los conductores a respetar las normas y colaborar con la mejora del orden urbano. “No se trata de sancionar por sancionar, han dicho, sino de construir una ciudad más segura, funcional y amigable para todos”, indicaron los voceros.