Por: Germán Yuca Ch. 

Ante el vencimiento del contrato de usufructo del campo ferial de Cerro Juli, desde la Sociedad Agrícola de Arequipa (Sada) demandan que el nuevo acuerdo dé prioridad al sector agrario y ganadero de nuestra región. Debido a que actualmente atraviesan diversas problemáticas, se requiere promover y dar espacio a iniciativas que ayuden a la población dedicada a éstas actividades, tal como buscaba el contrato original firmado a finales de 1993.

FECHA DE VENCIMIENTO ES EL 18 DE MAYO

Tras 31 años de concesión al sector privado, el próximo 18 de mayo vence el contrato de usufructo del campo ferial de Cerro Juli con la Asociación Empresarial del mismo nombre. Una vez que finalice, las 19 hectáreas otorgadas deberán volver a la administración del Ministerio de Desarrollo Agrario y Riego (Midagri), el dueño original, y deberá iniciarse un proceso de usufructo con nuevos términos contractuales. En ese sentido, desde la Sada demandan el cumplimiento del acuerdo inicial. 

«La expropiación de Cerro Juli buscó –desde sus inicios– beneficiar al agro, pero –tras el contrato con el privado– no fue así. Por eso nosotros, como Sada, buscamos que se cumpla esa finalidad. (…) Queremos que la participación en el nuevo convenio dé preponderancia al sector agricultura, tal como siempre debió ser.  (…) No obstante, también consideramos que se debe representar el sector minero y servicios empresariales, en pro de Arequipa», sostuvo el presidente de la Sada, Adolfo de Córdova Vélez.

Como se recuerda, el usufructo del campo ferial con la Asociación Ferial Cerro Juli fue cuestionado pues tras 29 años el privado entregó solamente S/270 mil 960 a la Gerencia Regional de Agricultura. Pese a que el convenio estipulaba que se debía brindar un aporte correspondiente al 7% de las utilidades. De modo que tras una recaudación millonaria gracias a eventos como PERUMIN, FIA, incontables conciertos y eventos de alcance mundial se otorgó un monto que no corresponde con la recaudación real. Lo que perjudicó a la gerencia de Agricultura y, por tanto, al gobierno regional. 

De acuerdo al titular de la Sada, el campo ferial Cerro Juli debe continuar dando espacio a ferias de diferentes sectores, pero además debe potenciar programas como Expoagro y permitir que se realicen actividades tradicionales como peleas de toros y espectáculos de caballos de paso. Por ello, De Córdoba Vélez solicitó al GRA que el sector agrícola y ganadero obtenga representatividad a nivel regional. Aunque, en última instancia, la decisión final la tiene el Ministerio de Agricultura. 

No obstante, desde la Gerencia Regional de Agricultura se sumaron a los pedidos de la Sada, pues coincidieron en que el campo ferial Cerro Juli debe destinarse al apoyo de las actividades agrícolas y ganaderas de Arequipa. No obstante, ante el perjuicio monetario ocasionado en estos 31 años, relegaron la evaluación y fiscalización al Midagri, dado que serán ellos quienes deberán efectuar los balances fiscales y decidir el destino final de el campo ferial Cerro Juli. 

«Es bueno que el Jardín de la Cerveza organice eventos con el sector privado, pero también es necesario que Cerro Juli cumpla su rol fundamental: promocionar el agro. Más aún, cuando se requiere efectuar acciones para la seguridad alimentaria, el hambre cero y las ferias agropecuarias. Esto está en manos de Lima, ellos definirán si el convenio vuelve a Arequipa y si –a través del GRA– se entrega a una institución pública o privada que pueda cumplir los objetivos», sostuvo el gerente regional de Agricultura, Abel Calderón Fernández. 

Desde el Midagri se remitió formalmente este pedido el pasado mes de febrero. De modo que ahora depende únicamente de este ministerio decidir si el campo ferial retorna a la administración del GRA o se queda en el Estado.