Por Jorge Turpo Rivas

El presidente de la Comisión de Infraestructura del Consejo Regional, César Huamantuma, denunció que la vía de acceso de la Nueva Molina se incluyó como componente de la autopista cuando no corresponde. Además, no tendrá utilidad inmediata porque no se termina el puente.

PROYECTO DE LA AUTOPISTA AREQUIPA-LA JOYA

La obra de la autopista Arequipa–La Joya corre el riesgo de convertirse en un proyecto eterno como Majes-Siguas II. Se inició hace más de una década y actualmente se encuentra suspendido y con cuestionamientos en las obras adicionales que decidió ejecutar la gestión del gobernador regional, Rohel Sánchez.

El presidente de la Comisión de Infraestructura del Consejo Regional, César Huamantuma, denunció que se están gastando 30 millones de soles en habilitar una vía provisional que unirá el puente y la carretera Panamericana.

Se trata del tramo de La Nueva Molina que tendría utilidad si se termina de instalar el puente de la autopista Arequipa–La Joya, pero los trabajos de la instalación del puente se suspendieron en marzo pasado y no tiene fecha de reinicio.

“Lo único cierto es que no se culminará este año y corre el riesgo de volverse en otro proyecto interminable”, dijo el consejero.

Según la denuncia de Huamantuma, planteada en el Consejo Regional y remitida a la Contraloría y la Fiscalía, la gestión de Sánchez estaría cometiendo una grave irregularidad en invertir 30 millones de soles en la vía La Nueva Molina porque la incluyó como un componente de la autopista cuando se trata de una obra externa o ajena al proyecto.

“Estarían cometiendo malversación de fondos, los componentes de la autopista son cuatro: el tramo uno, el puente, los dos túneles y el intercambio vial en La Joya, en ninguna parte incluye la vía de La Nueva Molina, pero lo están haciendo así. Ya están trabajando y gastando esos 30 millones de soles”, dijo.

Por su parte, el presidente del Consejo Regional, Fernando Cornejo, comentó que efectivamente no se justifica que la vía provisional de La Nueva Molina haya sido considerada como componente de la autopista.

“No es un componente, es una nueva obra. Bajo esa justificación están invirtiendo 30 millones de soles, ahora se tiene que determinar con qué sustento legal lo hicieron y si se justifica gastar tanto dinero en una obra provisional que cuando se haga la autopista ya no tendrá sentido”, comentó Cornejo.

¿Por qué se decidió hacer la vía de acceso de La Nueva Molina? La respuesta es sencilla: para darle utilidad al puente Arequipa–La Joya que no tendrá ninguna utilidad mientras no se construyan los dos túneles mellizos y el intercambio vial de La Joya.

Y esas obras, siendo optimistas, se realizarán en dos años. Por eso, para que el puente no quede inservible, se decidió habilitar una vía provisional en la zona de La Nueva Molina en Uchumayo.

“Lo peor es que la vía provisional de La Nueva Molina tampoco será útil porque la instalación del puente está entrampada y sin fecha de culminación. Estamos haciendo carreteras que no van a ninguna parte”, dijo el consejero regional.

PUENTE SIN FIN

La instalación del puente Arequipa–La Joya, cuyas estructuras metálicas se hicieron en Italia, debió estar lista en mayo de este año, según anunció el propio gobernador regional.

Pero, en marzo último, la contratista decidió suspender los trabajos y desmontar la inmensa grúa que usaban para colocar las estructuras del puente.

La razón: el gobierno regional no tramitó a tiempo ante la Contraloría el Adicional N° 9 de 2.5 millones de soles para acabar la instalación del puente.

La obra nunca se habría suspendido si la gestión de Sánchez habría respondido a tiempo el requerimiento de la contratista que comunicó desde el 2022 la necesidad del adicional.

Ahora, el mayor riesgo es que si la Contraloría observa el Adicional N° 9 (ya lo rechazó dos veces), la contratista puede paralizar la obra, solicitar la resolución del contrato y plantear un arbitraje. Eso implicaría que la obra quede postergada indefinidamente como el proyecto Majes-Siguas II.