Están en riesgo más de cinco mil personas.

Hace más de 50 años, el nevado Coropuna ingresó en un proceso de deglaciación irreversible y se estima que, en menos de 40 años, perderá por completo su capa de nieve. Esta situación amenaza con dejar sin agua para consumo humano y agrícola a toda la región. Además, desde el Gobierno Regional de Arequipa (GRA) advirtieron que el fenómeno pone en peligro de desaparición a las comunidades campesinas asentadas cerca del nevado.

De acuerdo con la Subgerencia de Comunidades Campesinas del GRA, muchas de estas comunidades ya experimentan estrés hídrico a causa del deshielo registrado en el Coropuna. La afectación alcanzaría a unas 40 comunidades, que en conjunto albergan entre 5 mil y 8 mil personas. Estas poblaciones se abastecen de los recursos hídricos del nevado, ya que se ubican en cabeceras de cuenca de las provincias de La Unión, Castilla y Condesuyos.

«El deshielo es consecuencia del cambio climático. Esto ha generado un incremento en la temperatura global y el retroceso de los glaciares. Lo podemos observar también en los nevados Chachani, Pichu Pichu e incluso el Misti. Aunque es un problema a largo plazo, hay que tomar las precauciones debidas. El retroceso de los glaciares afecta tanto a las comunidades campesinas como a diversos poblados», declaró Rolando Apaza Viveros, subgerente de Comunidades Campesinas del GRA.

Si bien el deshielo de glaciares ocurre por causas naturales, se requiere que las entidades estatales actúen de forma preventiva frente a los efectos adversos del cambio climático. En ese marco, el próximo 20 de septiembre se desarrollará una reunión en Pampacolca (Castilla), con la participación de comunidades campesinas de La Unión, Castilla y Condesuyos. El objetivo será plantear alternativas para enfrentar el cambio climático, una problemática que ya afecta a la región Arequipa.