El subgerente de Transporte nos recuerda que debemos tratar a los demás con respeto.

Por Danna Felipe B.

Tratos que ningún trabajador merece. No hay día laboral en el que los inspectores de la Municipalidad Provincial de Arequipa no sean víctimas de agresiones verbales por parte de conductores que no toman en cuenta que están frente a una autoridad en las vías, y son maleducados incluso con damas de chaleco celeste.

“Hemos ido a Vidaurrazaga. Hemos limpiado toda la avenida, el paradero hacia Hunter. Hemos puesto conos, inspectores. ¿Y qué pasa? Al último inspector, esos jaladores le comienzan a insultar, a amenazar. La agresión verbal es el día a día del inspector”, asevera René Ortiz, subgerente provincial de Transporte Interurbano y Especial.

EL INSPECTOR TRABAJA PARA EL CONDUCTOR

El subgerente nos recuerda que las funciones del inspector, tal como su nombre lo indica, son inspeccionar y también fiscalizar el transporte urbano, interurbano y especial, siendo este último los taxis, transporte de trabajadores, estudiantes y carga de mercancías.

Ortiz Zegarra hizo un llamado a los conductores a practicar el valor base de todo ser humano, el respeto. “El inspector no sale a las calles a fastidiar; sale a dar a los conductores mayor fluidez. Hay zonas donde se le dice que no haga un mal uso del espacio público, que es de todos. ‘¿Y quién eres tú para decirme que me salga?’ Esa es la respuesta constante”, lamenta.

DECLIVE DE LA CONCIENCIA CÍVICA

Por eso también lamenta el declive de la conciencia cívica. No solo son faltas constantes de respeto a la autoridad en las vías, que incluso han llegado a agresiones físicas; los conductores no saben comportarse correctamente.

“Se está perdiendo la conciencia cívica. El respeto no solo a la autoridad. No es que, si no hay nadie, me paso la luz roja; si no hay nadie, me estaciono en zona rígida; si no hay nadie, no me pongo el cinturón. No. No es necesario tener a la autoridad detrás de uno para cumplir las normas de tránsito”, finalizó nuestro entrevistado.

Estas normas se nos han enseñado desde niños en los colegios, las conocemos, pero lamentablemente no las cumplimos y contribuimos al caos vehicular.