Un cohete impreso en 3D logra despegar con éxito
— Redacción Diario El Pueblo —
ESTADOS UNIDOS
El cohete Terran 1, el primero con la mayoría de sus componentes fabricados con impresoras 3D, despegó con éxito de Cabo Cañaveral, en Florida (EE.UU.), pero, tras superar la atmósfera, sufrió un fallo en la segunda etapa que le impidió alcanzar la órbita prevista.
Aun así, el despegue del cohete, fabricado por Relativity Space, sirvió para demostrar que las tecnologías de impresión en 3D son viables para aguantar un despegue y para soportar con éxito Max-Q, el estado de tensión más alto para sus estructuras impresas, destacó la compañía en Twitter.
«Hoy es una gran victoria, con muchas primicias históricas». En los próximos días «evaluaremos los datos de vuelo y proporcionaremos actualizaciones públicas», concluyó Relativity Space.
Tras dos intentos fallidos, los días 8 y 11 de marzo, el cohete Terran 1 despegó anoche a las 11:25 p.m. EDT (las 3:25 GMT), ascendió en línea recta y después se arqueó hacia el este sobre el océano Atlántico.
Dos minutos y 50 segundos después, los motores de la primera etapa se apagaron como estaba previsto y la etapa se desprendió con éxito.
En la retransmisión en directo, la cámara instalada en el cohete mostró que el motor de la segunda etapa comenzaba a arrancar unos segundos después, pero no parecía encenderse del todo. Casi 6 minutos después de despegar los comentaristas de la empresa confirmaban que el vehículo no había alcanzado la órbita.
«Nuestro equipo analizará cuidadosamente los datos para determinar lo que ha ocurrido», anunció una de las comentaristas.
Terran, que no llevaba ninguna carga útil en este lanzamiento, mide 35 metros de largo y 2.2 metros de diámetro, y sus motores -también impresos en 3D- utilizan oxígeno líquido y gas natural licuado.
El cohete desechable de dos etapas, llamado «Good Luck, Have Fun» («Buena Suerte, Diviértete»), cuenta con nueve motores Aeon en su primera etapa y un Aeon 1 para la etapa superior, y tiene capacidad para transportar hasta la órbita terrestre baja una carga de 1,250 kilos.
TERRAN 1
El Terran 1 está construido en un 85 % con tecnología basada en impresiones 3D, pero la meta de Relativity Space, con sede en California, es llegar a un 95 % en las futuras versiones del cohete, que se llamarán Terran R.
«Al igual que su estructura, todos los motores de Relativity están completamente impresos en 3D y utilizan oxígeno líquido (LOX) y gas natural líquido (GNL), que no solo son los mejores para la propulsión de cohetes, sino también para la reutilización», detalla la compañía.