¿Qué pasa con los alcaldes?
Por: Carlos Meneses
El primer año de gestión municipal está terminando sin muchos éxitos para los ciudadanos electores. Es de esperar que el 2024 sea uno de mayores logros de objetivos y que organizaciones vecinales se conformen para apoyar gestión de los municipios que hasta ahora no son eficientes y eficaces.
Los alcaldes provinciales y distritales de Arequipa y del Perú entero se renovaron el 1ero de enero de 2023. Una rápida evaluación de su gestión de 4 años permite asegurar que la mayoría de ellos y sus administraciones no han sido exitosas, incluido el alcalde de Lima que ha tenido, sobre todo, en los últimos meses serios problemas con su comunidad y con sus errores.
En Arequipa, Víctor Hugo Rivera anuncia ahora que entre el 20 y 21 de noviembre dará a conocer los resultados de una evaluación de sus gerentes y responsables de las principales dependencias comunales, agregó a tal información que se decidirán cambios y que las nuevas autoridades que pudieran ser designadas asumirán funciones en el 2024.
Todo lo anterior y las dificultades propias de la situación económica y los anuncios de nuevos males en su mayoría naturales advierten que en el norte del país habrán problemas con las lluvias y en el sur con la sequía, motivos por los cuales la opinión pública espera de las autoridades comunales y regionales ejecuten acciones adecuadas para confrontar los riesgos que suponen un mayor encarecimiento en alimentos y también en la conservación y mejora de servicios públicos, especialmente, en lo referido a pistas y carreteras.
De otro lado, en las comunas se confrontan problemas con respecto a administraciones anteriores, habiendo presidentes regionales encarcelados o demandados por la justicia para esclarecimiento de cuentas. En la capital, hay ciudadanos que aún tienen que esperar bondades de quienes fueron elegidos para gobernarnos desde este año hasta el 2026.
Tenemos la mejor predisposición para colaborar con la obra que puedan realizar y también promover una participación vecinal que contribuya al éxito que bien merecen los pueblos que evidenciaron buena voluntad al elegirlos y que esperan recibir en respuesta de lo anterior, labores que se requieren para confrontar problemas y para resolver deficiencias encontradas.