Recorrer las calles de la ciudad es un desafío para discapacitados
EN AREQUIPA SON MÁS DE 150 MIL
Un recorrido por las calles de la ciudad de Arequipa revela una preocupante realidad: la arquitectura urbana actual presenta barreras para las personas con discapacidad motriz, en particular aquellas que dependen de sillas de ruedas para movilizarse.
Las veredas, lejos de ser espacios inclusivos, se han convertido en desafíos diarios para quienes enfrentan dificultades de movilidad. Los desniveles en las aceras, combinados con la ausencia de rampas adecuadas, grafican un acceso limitado e incluso imposible en ciertas zonas de la ciudad.
Obliga a las personas con limitación motriz a compartir la vía con los vehículos, exponiéndolos a riesgos innecesarios y socavando su derecho a la seguridad en la movilidad. Curiosamente, Arequipa es una ciudad orgullosa de la belleza arquitectónica, pero es excluyente tanto que incluso los turistas con discapacidad motriz no podría recorrer por sí mismos para disfrutar plenamente de los espacios públicos.
La Gerencia de Desarrollo e Inclusión Social del GRA tiene en sus registros aproximadamente 151 mil personas con discapacidad en la región, aunque 16 mil cuentan con carnet del CONADIS.