Por Erika Romero D.

Evitaron que inspector técnico verifique las condiciones de inseguridad de la Fiscalía Provincial Penal de Paucarpata.   

HECHOS OCURRIERON EN SEDE FISCAL DE PAUCARPATA

Si un ciudadano cualquiera se atreviera a impedir la realización de una inspección municipal sería sujeto de un proceso administrativo sancionador y de ser el caso de una denuncia penal por desobediencia a la autoridad en funciones.  En el Ministerio Público una disposición, que debe esclarecerse de dónde provino, impidió que el fiscalizador de la Municipalidad Distrital de Paucarpata, Alberto Jilaja Cruz ingrese a la sede fiscal de esa jurisdicción, ubicada en la calle Teniente Alcántara s/n en la Urb. Guardia Civil para verificar la calidad y condiciones del ambiente de drywall levantado en la azotea del edificio donde funciona el módulo de la Fiscalía. A este ambiente se pretende trasladar a los trabajadores que despachan en el primer piso porque pretenden liberar espacio para habilitar una Cámara Gesell.   

Es que seguramente deseaban evitar que el especialista técnico en Defensa Civil notara el hacinamiento en el que laboran los trabajadores asignados a esa dependencia del Ministerio Público.

Este diario dio cuenta que los pasadizos de la oficina fiscal se han convertido en improvisados archivos en donde se hacina una sobre otra las carpetas fiscales, impidiendo el paso de los trabajadores y de los usuarios que acuden hasta ese lugar para consultar por el estado de la investigación a cargo de la Fiscalía.

Incluso se detalló que los legajos han sido colocados en los servicios higiénicos y hasta debajo de las tuberías de desagüe de los lavamanos.

OBSTÁCULO

Ayer a las 09:41 horas de la mañana llegaron a las instalaciones de la dependencia fiscal la representante del Sindicato de Trabajadores del Ministerio Público (Arequipa), Claudia Mostajo Díaz y el inspector técnico en Defensa Civil de la Municipalidad de Paucarpata. Mostajo se presentó ante el vigilante que estuvo en la puerta y que controla quién entra y sale, impidiendo su ingreso.

El hombre le dijo que antes dejarla pasar se comunicaría vía telefónica con el coordinador de la sede, Javier Vera Salazar; Mostajo hizo lo mismo, pero no atendieron su llamado, luego se comunicó con el gerente administrativo de la Fiscalía para informarle que en cumplimiento de sus funciones como representante de los trabajadores se iba a realizar una inspección para garantizar las condiciones laborales de los agremiados y que su integridad física no corre riesgo.

Verbalmente el gerente administrativo autorizó el ingreso de Mostajo y el representante de la Municipalidad de Paucarpata, pero el vigilante no se movió de la puerta, argumentando que solo cumplía órdenes.

Después de esperar unos 20 minutos, aproximadamente y ante la negativa se levantó un acta que fue firmada por inspector técnico en Defensa Civil Alberto Jilaja y la representante del SITRAMIMP.

¿REPRESALIAS?

El pasado jueves llegaron al edificio de la Fiscalía Provincial Penal de Paucarpata un grupo de trabajadores de limpieza que asearon el ambiente de drywall habilitado en la azotea, ahí según el oficio firmado por el Fiscal Superior Coordinador Antonio Chacón Roselló se trasladarán los despachos de las fiscales Aida Tatiana Cárdenas Cuba y Rosaluz Aguilar Ramírez, de esta decisión también están informados el coordinador de las oficinas de Paucarpata, Javier Vera Salazar y el presidente de la Junta de Fiscales Superiores Ciro Alejo Manzano.

Ese mismo jueves 16 de noviembre, este diario hizo público las condiciones en las que trabajan en la Fiscalía Provincial Penal de Paucarpata, los trabajadores sospechan que el envío de personal de limpieza es una represalia.

TEMOR

Los trabajadores que prestan servicio en Paucarpata han señalado que temen represalias y que solo quieren que se garantice que su integridad física no esté en riesgo porque primero deben trabajar en medio de montículos de expedientes de investigaciones fiscales que en caso de un fuerte temblor podrían caer y entorpecer su salida del recinto o peor aún caer encima de ellos.

Del mismo modo si ocurriera un incendio, el papel es inflamable y se desconoce si la edificación en su integridad cuenta con un sistema contra incendios. La temporada de lluvias en la ciudad inicia en diciembre y culmina en marzo. Hace años en las oficinas de la calle La Merced construyeron en drywall una Cámara Gesell, por esos días llovió, el agua de las precipitaciones se empozó e ingresó al ambiente dañando los equipos.

EN SILENCIO

El miércoles 15, enterados de la situación en la que laboran los trabajadores de las oficinas de Paucarpata, consultamos con la servidora a cargo del área de Imagen de la Fiscalía, Mireya Ramírez Silva, sobre el descargo de la institución. Solo obtuvimos un largo silencio que se rompió a propósito de nuestra insistencia.

Ramírez, el viernes 17, respondió con un escueto mensaje vía Whatsapp: “El presidente no declarará está con varios pendientes y mucho trabajo”.