Pablo Lavandeira jugará en el FBC Melgar en el 2025, antes de unirse a la pretemporada dijo conocer al nuevo entrenador y asegura que le irá bien en la Copa Libertadores y la Liga 1.

Con 16 años de trayectoria profesional, Pablo Lavandeira, es uno de los futbolistas experimentados que tiene el FBC Melgar para la temporada 2025. Además, es el cuarto jugador nacionalizado peruano en el equipo, nació en Uruguay hace 34 años, debutó en el Tacuarembó de su país.

Este no fue su mejor año. A los problemas personales se le sumaron algunas lesiones, por si fuera poco, tuvo suspensiones. En julio había vuelto al once titular con la confianza del entrenador Marco Valencia, jugaba un buen partido ante Universitario de Deportes, pero se involucró en una bronca que le costó tres partidos fuera de las canchas, así volvió a bajar su ritmo de juego.

Nadie sabe si está en la postrimería de su carrera deportiva, lo que sí es confirmado es que quiere dejar el alma en la siguiente temporada para ganar el campeonato nacional.

“Vuelvo con las energías recargadas, seguro va a ser un año duro el que se viene. Tengo las mejores expectativas y la mayor ilusión para trabajar muchísimo. Siempre apuntamos a lo más arriba”, dijo poco antes de unirse a la pretemporada del grupo en Mollebaya.

No evitó pronunciarse sobre la llegada de Walter Ribonetto como entrenador. Pablo dijo que lo conoce bien y que es un gran profesional. “Melgar acertó en traerlo. El fútbol no es solo el profesionalismo, sino suerte. Él conoce el medio es una gran elección y le va a ir muy bien”.

Lavandeira llegó a FBC Melgar procedente de Alianza Lima, precisamente el club al que se fue su excompañero Jean Pierre Archimbaud, sobre la situación prefirió no profundizar y solo apuntar: “Me pone muy feliz que esté logrando el sueño de toda su vida, es más que merecido, sé que lo va disfrutar y aprovechar muchísimo”.

Si es que el mediocampista se hace dueño de su sector para generar fútbol como lo hizo en su primer año en Arequipa, es seguro que empujará al equipo hacia las victorias. Lo ideal será que tenga un poco más de “suerte” a la hora de definir y que cambie la historia de pocos partidos jugados y solo dos goles en su haber como en este 2024 para su olvido.