¿Qué sucede en el mundo si el papa Francisco muere o renuncia?

La preocupación por la salud del papa Francisco ha puesto en alerta a la comunidad religiosa, ya que a sus 88 años enfrenta un cuadro clínico de neumonía bilateral, lo que ha debilitado su estado de ánimo y lo llevó a internarse el 14 de febrero en el Hospital Policlínico Agostino Gemelli de Roma.
ENVIÓ SALUDO DESDE EL HOSPITAL
Aunque el Vaticano ha informado sobre la mejoría del sumo pontífice, los creyentes mantienen la incertidumbre sobre si Francisco podría presentar su renuncia, como lo hizo Benedicto XVI en febrero de 2013. Además, se analiza el protocolo a seguir en caso de que el máximo líder de la Iglesia católica fallezca.
Ante la ausencia de un líder en la Iglesia católica, la comunidad religiosa debe llevar a cabo un proceso conocido como Cónclave, el cual activa el protocolo para la elección de un nuevo pontífice. Su importancia es fundamental, ya que el papa es el obispo de Roma y el jefe de Estado de la Ciudad del Vaticano.
EN CASO DE RENUNCIA
La sucesión del sumo pontífice tras una renuncia inmediata es un evento poco común en la Iglesia católica, según el padre Rodolfo Rodríguez. Este proceso solo ha ocurrido con Benedicto XVI, quien renunció en 2013 debido a su deterioro en la salud, lo que le impedía cumplir adecuadamente con sus funciones.
La decisión corresponde únicamente al papa Francisco o a cualquier pontífice futuro. En caso de renuncia, se activarían los protocolos establecidos en el Código de Derecho Canónico para iniciar el proceso de sucesión, garantizando la continuidad en la dirección espiritual de la Iglesia.
«Ya lo vimos con Benedicto XVI. Aunque la tradición dicta que el papa sirve hasta el final de su vida, su renuncia es una opción libre. En caso de que Francisco decidiera dar un paso al costado por motivos de salud, seguiría el mismo proceso que con Benedicto XVI, manteniendo el título de papa emérito.» resaltó el padre Rodríguez Chinchilla.
Además, aclara que la renuncia solo sería aceptada si el papa presenta una enfermedad o incapacidad que le impida ejercer sus funciones, si esto ocurre, el Cónclave se convocaría de inmediato para la elección de su sucesor.
PROTOCOLO
De acuerdo con el Código de Derecho Canónico, la renuncia de un papa no requiere la aceptación de ninguna autoridad eclesiástica. Sin embargo, esta decisión debe ser comunicada al Colegio de Cardenales.
La ley establece que la renuncia se hace efectiva en el momento que el pontífice lo determine, lo que da inicio al período de Sede Vacante y activa el proceso de elección del nuevo papa mediante el Cónclave.
«La Iglesia no puede quedar sin un líder. Por ello, el Vaticano convoca de inmediato a todos los cardenales del mundo para participar en el Cónclave, el proceso mediante el cual se elige al nuevo sumo pontífice.» dijo el padre Rodríguez.
Este mecanismo de sucesión se ha mantenido en la Iglesia católica por más de 800 años. Durante el Cónclave, el Colegio de Cardenales se reúne en la Capilla Sixtina para elegir al próximo sumo pontífice.
El protocolo establece que todos los cardenales menores de 80 años deben asistir al Cónclave, donde elegirán al nuevo papa por mayoría de votos. Para ser electo, el candidato debe obtener al menos dos tercios de los votos de los cardenales.
Durante este período, los cardenales son aislados del mundo exterior y participan en un proceso de oración, en el que buscan sabiduría y discernimiento para tomar la decisión.
En este periodo los cardenales realizan votaciones secretas hasta alcanzar una mayoría. En caso de que un candidato no obtenga los votos suficientes, las papeletas se queman y se libera humo negro, señalando que el proceso continúa. Una vez elegido el nuevo papa, el humo que sale por la chimenea es blanco, lo que indica que la Iglesia tiene un nuevo líder.
SUCESIÓN EN CASO DE FALLECIMIENTO
En caso de fallecimiento del papa Francisco o de cualquier futuro pontífice, el Vaticano debe activar el protocolo de Sede Vacante, lo que implica el sellado del lugar de su muerte, la suspensión de audiencias y la activación del proceso de elección del nuevo papa a través del Cónclave.
«La Iglesia no puede quedar sin un líder. Por ello, el Vaticano convoca de inmediato a todos los cardenales del mundo para participar en el Cónclave, el proceso mediante el cual se elige al nuevo sumo pontífice», enfatizó el padre Rodolfo Rodríguez.
Al ser electo, el nuevo papa debe aceptar el cargo y, posteriormente, salir al balcón de la Basílica de San Pedro para impartir su primera bendición Urbi et Orbi, lo que establece un nuevo ciclo en la Iglesia.
Tras la elección del nuevo papa, se llevan a cabo las exequias del pontífice fallecido, cuyo cuerpo es velado en la Basílica de San Pedro antes de su entierro en las criptas vaticanas.
El padre Rodríguez Chinchilla hizo un llamado a los fieles católicos a unirse en oración por la salud del papa Francisco.