Frente al hospital Goyeneche, en el portal San Agustín y en las ópticas de la calle Peral son puntos por donde un grupo considerable de personas evita pasar.

Por Danna Felipe B.

Los residentes arequipeños comprenden la necesidad de algunos comerciantes de atraer a más clientes a sus respectivos negocios. Contratan «jaladores» para lograrlo. Sin embargo, en algunos casos, estos trabajadores llegan al hostigamiento y causan el efecto contrario.

Probablemente alguna vez has evitado pasar por la avenida Goyeneche, precisamente frente al hospital del mismo nombre. En toda la cuadra hay personas esperándote para ofrecerte una amplia variedad de análisis médicos. Incluso caminan a tu lado por un buen tramo de la vereda, especialmente si eres mujer.

En la Plaza de Armas ocurre prácticamente lo mismo. Empero, esta vez, los «jaladores» te ofrecen comer y beber en los restaurantes ubicados en el portal de San Agustín o diferentes servicios turísticos.

Por último, la calle Peral alberga la mayoría de ópticas en el centro. Sus empleados también se esmeran por llamar tu atención, principalmente si llevas puestos unos lentes.