Por: Germán Yuca Ch.

Aunque ya ingresan buses transportadores de GLP a Arequipa, el déficit en el mercado continúa debido a la alta demanda de los consumidores locales.

Pese a que los grifos ya retomaron el abastecimiento de Gas Licuado de Petróleo (GLP), la demanda por el combustible es superior al suministro recibido; por lo que el déficit de GLP continúa en Arequipa. La escasez inició el pasado 17 de agosto y –durante los días de desabastecimiento– se reportó que el gas licuado incrementó su precio hasta en S/3. en las principales estaciones de gas locales. 

Debido a la reducción en la importación, el GLP llegó a escasear en el 70% de grifos de Arequipa. En un inicio, el vicepresidente de la Asociación de Grifos de Arequipa, Magno Salas Montiel, estimó que el servicio se normalizaría el 24 de agosto, pero no ocurrió acorde a lo esperado. Según los choferes de cisternas que transportan el combustible, la situación adversa se debe a que la planta expendedora de gas –ubicada en el Callao– no atiende la demanda de los clientes de provincia y prioriza a los residentes de la capital, Lima. 

«Los transportistas de GLP nos han manifestado esta queja. Vamos a verificar si la planta de GLP tiene disposición por la que debe atender solo a Lima. (…) Consideramos que el desabastecimiento ya debía haberse corregido, pero la importación no cubre la demanda y esto crea el déficit en el mercado. Vamos a evaluar la situación y emitiremos un nuevo pronunciamiento», sostuvo el vicepresidente de la Asociación de Grifos de Arequipa, Magno Salas Montiel. 

El vicepresidente de la Asociación de Grifos de Arequipa resaltó que este desabastecimiento es diferente al de finales del año pasado, mismo que se debía a los bloqueos en la carretera Panamericana Sur que impedían el ingreso de este combustible. No obstante, la reciente escasez es causada por problemas de exportación a gran escala.

Debido a la crisis en el canal de Panamá –a causa de oleajes anómalos y problemas medioambientales– el principal proveedor de GLP del Perú redujo la dotación enviada, por lo que el problema se expandió a nivel nacional. Por si fuera poco, en fechas recientes el titular del Ministerio de Energía y Minas, Óscar Vera, informó que gracias al inicio de la producción en la refinería de Talara, el GLP sería distribuido en el norte del país durante este fin de semana. Hecho que aliviaría la crisis a nivel nacional, pero que dejaría en segundo plano al sur del Perú. 

«La demanda es a nivel nacional y el reabastecimiento debe hacerse a nivel nacional. Ya están entrando buses transportadores a Arequipa y nos estamos abasteciendo, pero el déficit en el mercado continúa porque los consumidores compran de más. El consumo que antes era de S/50 ahora es de S/100», declaró el vicepresidente de la Asociación de Grifos de Arequipa.

Situación visible en los grifos locales, pues pese a la reducción del abastecimiento de GLP, las grandes filas en los exteriores de los grifos continúan y los consumidores locales se apresuran a adquirir todo el combustible que pueden, agravando aún más la problemática a nivel regional e, incluso, nacional.

El desabastecimiento se siente también en algunas distribuidoras de balones para uso doméstico; pues ante la escasez el precio del GLP aumentó ligeramente. De modo que un balón de 10 kilogramos fluctúa entre los S/45 y S/52.