Arzobispo: mayoría de autoridades están incapacitadas para hacer el bien común
Por: Roxana Ortiz A.
La mayoría de las autoridades están incapacitadas para hacer el bien común, tanto en las altas esferas como en los pueblos más pequeños, priorizando su bienestar personal, antes que el de los demás. Está muy presente ese virus de la corrupción que tanto daño nos ha hecho como país, señaló monseñor Javier del Río Alba, Arzobispo de Arequipa, como parte de la homilía en la misa y Te Deum celebrada por Fiestas Patrias.
“Según la Contraloría General, son miles de millones de soles lo que se van por actos de corrupción, mientras que hay familias enteras que se mueren de hambre, que no tienen qué comer, niños sin colegios en donde estudiar y enfermos que se mueren por falta de atención oportuna”, dijo ante las autoridades locales y regionales que habían acudido a la Catedral de Arequipa.
Es por eso que les hizo un llamado para que en estos días puedan reflexionar sobre lo que están haciendo y lo que queda por hacer, especialmente pensando en el prójimo, en las necesidades que tienen los demás peruanos, y de esta manera corregir y enmendar el rumbo.
“Pero todavía hay una salida a esta crisis y no va por culparnos unos a otros, en pedir la vacancia, el adelanto de elecciones, ni quedarse hasta el 2026; sino en unirnos y apoyarnos en Dios, porque no hay más pruebas de que Dios es peruano, que está con nosotros, porque de otra manera no estaríamos aquí”, añadió.
Posteriormente, el Prelado de la Iglesia Católica en Arequipa, se refirió al presidente Pedro Castillo y al mensaje que debe dar a los peruanos, después de una sentida reflexión. “Si el Presidente reconoce los errores, esto no lo debilitaría, por el contrario lo ennoblecería, sobre todo si al reconocerlos presenta medios concretos para rectificarlos”.
Por otro lado, la autoridad eclesial volvió a referirse al prostíbulo instalado en el distrito de Cerro Colorado, con el auspicio de las autoridades locales que le dieron la autorización para funcionar, señalando que lo único que se consigue es legalizar el maltrato hacia las mujeres que trabajan en ese lugar por necesidad, además de pisotear su dignidad.
Agregó que detrás de cada una de ellas, hay una historia de mucho dolor, de mucho sufrimiento, pues están en ese oficio por tener a una familia a la cual alimentar. “Existen las drogas, existen los asaltos, los robos y no por eso se van a legalizar. De lo malo nunca va a salir algo bueno”, añadió.